Pese a la sanción de la ley de promoción del sector autopartista e incentivos que las propias terminales están impulsando para mantener el dinamismo de un sector que sufre como pocos la recesión en Brasil, la industria local de autopartes no lograr aún reaccionar y atraviesa un 2016 para el olvido.
Un informe de la consultora Investigaciones Económicas Sectoriales (IES Consultores) destaca que durante el primer semestre de 2016, las ventas en dólares del sector autopartes alcanzaron los US$ 2.086 millones, 11,8% por debajo del valor de igual período de 2015. “Dicho valor se mantiene en línea con los exhibidos por el sector durante el año 2015, cuando, según estimaciones provisorias, las ventas alcanzaron a los u$s 4.795 millones, con un 11% de descenso interanual, si bien, en cantidades, la caída habría sido aún mayor”.apunta IES.
Se trata de un sector particularmente permeable por lo que ocurre en materia de comercio exterior. Así, con la demanda de Brasil cayendo desde hace casi dos años y la eliminacióm de las restricciones al comercio exterior ? en diciembre se eliminaron las DJAI y se reemplazó por un sistema de monitoreo de importaciones, mucho más ágil y licencias no automáticas? la industria de autopartes se vio impactada por el incremento de la importación de vehículos terminados desde el exterior y no tanto por sustitución de proveedores.
“El incremento de automóviles importados compite directamente con aquellos fabricados en el país y reduce la demanda de piezas para la elaboración de automotores de origen nacional”, señala el informe.
La tendencia
Según IES las exportaciones cayeron durante el primer semestre 20,6% respecto a igual período de 2015,, alcanzando los US$ 704 millones, por lo que “mantienen la tendencia negativa que acarrean desde el año 2012”. Esto se dio en un contexto en el que las importaciones sufrieron una caída de 9,6%, cuyo total alcanzó a US$ 4.458 millones destinados a ingresar autopartes al país. Alejandro Ovando, director de IES Consultores, sostiene que “las perspectivas para 2016 continúan siendo desalentadoras, a pesar de las novedades positivas que ha recibido el sector. Sin embargo, la continuidad de la crisis en Brasil afecta sobremanera al sector e impide que se produzca un cambio de tendencia en un momento en el que la apertura de las importaciones dificulta aún más las cosas al incrementarse la exposición al mercado internacional”. Según el informe, el déficit total del sector autopartista pasó de US$ 4042 millones en los primeros seis meses de 2015 a US$ 3.754 millones en 2016, una reducción del 7,1%, que refleja, en parte, la crisis que atraviesa todo el complejo automotriz de la subregión. Los principales productos importados fueron sistemas de transmisión y sus elementos, accesorios internos y externos; motores y sus componentes; sistemas eléctricos; instrumentos de medición ruedas; neumáticos y cámaras, y sus partes; y manufacturas de plástico.
