Tras su última gira por China, que incluyó visitas a Pekín y Shanghái, la secretaria de Comercio de Estados Unidos, Gina Raimondo, advirtió que la paciencia de las empresas estadounidenses con el Gigante Asiático se estaba "agotando", remarcando que las compañías merecían un "entorno predecible e igualdad de condiciones".
Durante su estadía en China, Raimondo dijo que había un gran deseo entre las empresas estadounidenses de hacer que la relación funcionara y que, si bien algunas acciones del gobierno chino eran positivas, la situación sobre el terreno debía estar a la altura de la retórica.
"China lo está poniendo más difícil. Fui muy claro allí en lo que necesitamos: la paciencia se está agotando entre las empresas estadounidenses. Necesitan y merecen un entorno predecible y un campo de juego nivelado. Y esperemos que China preste atención a ese mensaje para que podamos tener una relación comercial estable y creciente", explicó este domingo.
Raimondo había detallado que las empresas estadounidenses enfrentan nuevos desafíos, entre ellos grandes multas inexplicables, redadas en empresas y cambios a una ley de contraespionaje.
"Fui muy clara, directa y firme en todas mis conversaciones con mis homólogos chinos. No me anduve con rodeos. No endulcé nada", agregó la última funcionaria estadounidense de alto rango en visitar China, tras lo hecho por los secretarios de Estado y del Tesoro, Antony Blinken y Janet Yellen, respectivamente.
Por otra parte, Raimondo se refirió a la actual crisis económica en China: "Creo que no hay duda de que la economía de China se está desacelerando. Y ciertamente están teniendo desafíos reales, muy importantes en el sector inmobiliario".
En este sentido, consideró que a la economía de China le fue mejor cuando era más transparente y orientada al mercado.
"Como han cerrado y se han vuelto más arbitrarios en la forma en que administran las regulaciones, la economía se ve bastante desafiada", sentenció.
