Pese a las críticas, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, continúa demostrando que aún tiene espalda para gobernar: este lunes, un bloque de centroderecha de Francia propuso un "pacto legislativo" que podría allanar el camino para un acuerdo más amplio con el partido de Macron.
Tras el llamado a elecciones anticipadas, con el objetivo de frenar el avance de la extrema derecha de Marine Le Pen, Macron vio cómo su partido se afianzó en el segundo lugar, aunque perdió muchas bancas respecto a 2022.
Así, las elecciones derivaron en un parlamento fragmentado en el que ninguna fuerza política obtuvo la mayoría necesaria para formar gobierno.
Muchos creían que, ante la inhabitual situación, se generaría un turbulento período de crisis en el país galo, justo en la antesala de los Juegos Olímpicos de París.
No obstante, la situación parece comenzar a encaminarse para Macron y compañía: la semana pasada, y gracias al apoyo del bloque de centroderecha, la presidenta del Parlamento, Yaël Braun-Pivet, ganó un segundo mandato, debilitando a la alianza de izquierda NFP, que finalizó primera en los comicios.
Los dos grupos políticos formaron una alianza ad hoc para reelegir a Braun-Pivet como presidenta de la Asamblea Nacional francesa, la cuarta funcionaria de mayor rango en Francia.
Los conservadores han rechazado públicamente la perspectiva de una coalición abierta con el bando pro-Macron, pero han señalado, en repetidas oportunidades, su disposición a encontrar un terreno común en la política.
Por ello, ahora presentaron un "paquete legislativo" centrado en políticas destinadas a "reconocer mejor el trabajo y restaurar la autoridad".
En este sentido, Laurent Wauquiez, jefe del antiguo grupo de Los Republicanos en la Asamblea Nacional, rebautizado como Derecha Republicana, dijo que se necesitaba un pacto si Francia quería escapar del purgatorio de un parlamento colgado.
"Este pacto legislativo es la ilustración de nuestra voluntad de no bloquear el país, de dar soluciones", explicó, aunque dejó en claro que su grupo no respaldaría ningún aumento de impuestos o medidas para debilitar los beneficios de los jubilados.
Además, agregó que el grupo vería con buenos ojos las propuestas para impulsar la seguridad y los servicios públicos, aunque negó estar ofreciendo una coalición de gobierno.
