A pesar de que la suba de la inflación afecta tanto a Estados Unidos como a la zona euro, las respuestas de sus bancos centrales son diferentes.
- La Reserva Federal comenzó la semana pasada un ciclo alcista de la tasa de interés y probablemente decida subas de un cuarto de punto en las seis reuniones que realizará hasta fin de año.
- Mientras tanto, el Banco Central Europeo no ha definido si subirá las tasas aunque el mercado considera que es inevitable que tenga que hacerlo en una o dos oportunidades dado que la inflación trepó hasta el 5,9% anual en febrero.
De todas maneras, la titular del BCE, Christine Lagarde, reiteró hoy en una conferencia que no actuará en sincronía con la Fed porque sus economías están en diferentes etapas del ciclo.
La banquera gala destacó que por obvias cuestiones geográficas, Europa está más expuesta que Estados Unidos a la guerra en Ucrania.
Otra diferencia es que Europa depende más de las importaciones de commodities y por lo tanto su comercio se verá más afectado.
En otro plano se ubica China que hoy mantuvo inalterada la tasa de referencia para los préstamos, pero el mercado estima que las autoridad monetaria deberá aflojar su política en el segundo trimestre para lograr el objetivo de crecimiento de 5,5% del PIB que se fijó el Gobierno.
Mientras tanto, para frenar la aceleración de la tasa de inflación, todos los bancos centrales de América Latina están endureciendo sus políticas monetarias.
- Brasil subió la tasa de interés la semana pasada y en la que hoy se inicia lo harán México y Argentina que está obligada, además, por el acuerdo con el FMI.
