Durante los últimos 10 años, tras la crisis financiera de 2009, el mundo experimentó un momento de relativa tranquilidad, más allá de algunos cimbronazos como la invasión rusa de Crimea en 2014, la aprobación del Brexit en el Reino Unido en 2016 o el triunfo de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos del mismo año.
Sin embargo, nadie se imaginaba que lo peor estaba por venir: en el lapso de menos de tres años, el mundo se enfrentó a una pandemia sin precedentes y a una nueva guerra en Europa, la más sangrienta desde la Segunda Guerra Mundial.
A esto se suman otros asuntos como la creciente tensión entre Estados Unidos y China, los cada vez más visibles conflictos internos dentro de la Unión Europea, y las amenazas nucleares de Irán y Corea del Norte, entre otros temas.
Por ello, ante la creciente expectativa de que un nuevo cisne negro surja, y aunque desde hace muchos años Eurasia Group presenta anualmente su informe sobre las principales amenazas que existen, la edición de este año fue una de las más esperadas.
A continuación, El Economista, que participó en la conferencia de presentación del informe, resume los puntos más importantes que tienen como objetivo ayudar a los inversionistas, las empresas y los miembros del público a prepararse y responder a las oportunidades y desafíos que surgirán a lo largo de este año.
- Rusia rebelde
Coescrito por el presidente y fundador de Eurasia Group, Ian Bremmer, y el presidente, Cliff Kupchan, se destaca, como era de esperar, que el gran desafío de la humanidad seguirá siendo Rusia.
El próximo 24 de febrero, la guerra en Ucrania cumplirá un año y, lejos de acercarse a su final, la tensión sigue en aumento en la región. Ucrania ha resistido más de lo esperado, algo que hubiese sido imposible sin la ayuda occidental, mientras que en el Kremlin sienten que han llegado demasiado lejos para dar marcha atrás.
En este sentido, se destaca que "una Rusia acorralada pasará de ser un jugador global a convertirse en el estado rebelde más peligroso del mundo, lo que representa un peligro grave y generalizado para Europa, EE. UU. y más allá. Empantanada en Ucrania, con poco que perder con un mayor aislamiento y represalias occidentales, y enfrentando una intensa presión interna para demostrar su fuerza, Rusia recurrirá a una guerra asimétrica contra Occidente".
Lee también
Tendencia Se desacelera la inflación en Alemania
Uno de los mayores temores es que Moscú, finalmente, concrete sus amenazas nucleares. Sin embargo, aunque los autores consideraron que "el ruido de sables nucleares de Putin se intensificará", su uso sigue pareciendo poco probable.
"Los piratas informáticos afiliados al Kremlin intensificarán los ataques cibernéticos cada vez más sofisticados y Rusia intensificará su ofensiva contra las elecciones occidentales apoyando y financiando sistemáticamente la desinformación y el extremismo. En resumen, Rusia es una amenaza para la seguridad global, los sistemas políticos occidentales, la ciberesfera y la seguridad alimentaria", destacó el informe.
- Xi máximo
En marzo, China experimentará un hecho sin precedentes cuando el presidente Xi Jinping asuma un inédito tercer mandato, convirtiéndose en el líder más poderoso desde Mao Zedong.
Así, Xi tendrá un control del sistema político de China sin igual con muy pocos límites en su capacidad para avanzar con su agenda política estatista y nacionalista. El problema es que la falta de contrapesos podría provocar que comience a cometer grandes errores a largo plazo.
"Vemos riesgos en tres áreas este año: Los efectos nocivos de la toma de decisiones centralizada sobre la salud pública continuarán con la propagación de Covid-19. El impulso de Xi por el control estatal de la economía producirá decisiones arbitrarias, volatilidad política y una mayor incertidumbre para un país ya debilitado por dos años de esfuerzos extremos para mitigar la pandemia. Finalmente, las opiniones nacionalistas y la política exterior asertiva de Xi provocarán cada vez más la resistencia de Occidente y de los vecinos asiáticos de China", agregaron desde Eurasia Group.
- Armas de disrupción masiva
Otro de los asuntos a tener en cuenta es el de los constantes avances tecnológicos, principalmente en lo que respecta a la Inteligencia Artificial.
Respecto a este asunto, los avances recientes podrían permitir manipular a las personas: por ejemplo, una nueva forma de la tecnología, conocida como IA generativa, dejará que los usuarios creen imágenes, videos y texto realistas.
Este tipo de herramientas ayudarán a los autócratas a socavar la democracia en el extranjero y sofocar la disidencia. Además, permitirán a los demagogos y populistas dentro de las democracias utilizar la IA como arma para obtener ganancias políticas limitadas a expensas de la sociedad civil.
- Ondas de choque de la inflación
Sin dudas, uno de los asuntos que más preocupó al mundo durante 2022 fue la elevada inflación. Países como Estados Unidos o el Reino Unido experimentaron sus niveles más altos en décadas, lo que los obligó a subir sus tasas de interés a niveles récords.
Ante este panorama, se espera que "el shock inflacionario global tenga poderosos efectos económicos y políticos en 2023. Será el factor clave de la recesión global, se sumará a la volatilidad del mercado y al estrés financiero, y producirá perturbaciones sobre la política en todas las regiones del mundo".
- Irán en un rincón
Desde hace años, Irán es considerado uno de los países más peligrosos del mundo. Sin embargo, la tensión ha aumentado significativamente desde que Donald Trump ordenó que EE.UU. abandonara el acuerdo nuclear con el país de Medio Oriente.
"Las protestas antigubernamentales en todo el país continúan. Al mismo tiempo, Teherán ha intensificado su programa nuclear de manera dramática, casi acabando con cualquier posibilidad de revivir el acuerdo nuclear. Y ahora está suministrando armas letales al ejército de Putin. Mientras Irán enfrenta convulsiones en casa y arremete contra el extranjero, este año presentará nuevos enfrentamientos entre la República Islámica y Occidente", agregó el informe.
- Crujido de energía
La combinación de factores geopolíticos y económicos crearán condiciones mucho más estrictas en el mercado energético, particularmente en la segunda mitad de 2023, elevando los costos para los hogares y las empresas, y aumentando la carga fiscal de los gobiernos importadores. Esto ampliará la brecha entre la OPEP+ y los principales consumidores.
- Desarrollo global detenido
Durante muchos años, el PIB mundial creció y la mayoría de los países lograron alcanzar importantes hitos económicos, lo que produjo que más de 1.000 millones de personas salieran de la pobreza extrema. Pero ese progreso se ha visto revertido tanto por la pandemia como por la guerra, lo que ha desembocado en un aumento de la inflación mundial.
"En 2023, miles de millones de personas se volverán más vulnerables a medida que se pierdan los logros económicos, políticos y de seguridad. La clase media mundial se reducirá y seguirá una mayor inestabilidad política, dentro y entre los países", alertó el informe.
- Estados Unidos dividido
Pocas veces en la historia de EE.UU. se ha visto una sociedad tan polarizada, en parte como consecuencia de la retórica de los dos líderes políticos más importantes del país: Joe Biden y Donald Trump.
Pero, cuando todo hacía prever un contundente triunfo republicano en las elecciones de medio término del año pasado, los demócratas salieron mejor parados y evitaron un Congreso todo rojo.
Sin embargo, EE.UU. sigue siendo uno de los países más avanzados del mundo políticamente polarizados y disfuncionales. Por ello, las divergencias políticas extremas entre los estados rojos y azules dificultarán que las empresas traten al país como un mercado único coherente, a pesar de sus fortalezas económicas.
- Auge de Tik Tok
El informe destaca que los "nacidos entre mediados de la década de 1990 y principios de la de 2010, los miembros de la Generación Z, son los primeros sin experiencia de vida sin Internet. Los dispositivos digitales y las redes sociales los han conectado a través de las fronteras para crear la primera generación verdaderamente global".
"Y eso los convierte en un nuevo actor político y geopolítico, especialmente en Estados Unidos y Europa. La Generación Z tiene tanto la capacidad como la motivación para organizarse en línea y remodelar las políticas corporativas y públicas, dificultando la vida de las empresas en todas partes e interrumpiendo la política con solo hacer clic en un botón", agregó.
- Estrés hídrico
Por último, se destaca que el estrés hídrico se convertirá en un desafío global y sistémico. Este requerirá una transición de la crisis del agua a la gestión del riesgo hídrico, aunque no se materializará en 2023, lo que obligará a los inversores, las aseguradoras y las empresas privadas a descubrir cómo manejar este desafío por su cuenta.
