Mientras los ojos del mundo están puestos en Medio Oriente, Ucrania recibió una gran noticia: el Ejecutivo de la Unión Europea recomendó invitar a Kiev a iniciar conversaciones de membresía tan pronto como cumpla con las condiciones finales.
La Comisión Europea dijo que las conversaciones deberían iniciarse formalmente una vez que Kiev cumpla las condiciones restantes relacionadas con el control de la corrupción, la adopción de una ley sobre lobby en línea con los estándares de la UE y el fortalecimiento de las salvaguardias de las minorías nacionales.
Tras conocer la noticia, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, consideró que "este es un paso fuerte e histórico que allana el camino hacia una UE más fuerte con Ucrania como miembro".
Ahora, los 27 líderes nacionales de la UE deben decidir, a mediados de diciembre, si aceptan la recomendación de la Comisión, aunque el problema es que cualquier resolución de este tipo requiere la unanimidad de los 27 miembros del bloque.
En este sentido, teniendo en cuenta que la UE obliga a sus países a salir en defensa de un miembro que es atacado, parece difícil creer que aceptarán a un Estado que actualmente está en guerra, lo que prácticamente los obligaría a combatir con Rusia.
Pero, si se acepta, los funcionarios de la UE esperan que las conversaciones formales de adhesión con Kiev comiencen el próximo año. Hasta ahora, Ucrania cumplió cuatro de siete condiciones para iniciar conversaciones formales de adhesión.
Por su parte, la presidenta de la CE, Ursula von der Leyen, consideró que "Ucrania sigue enfrentando enormes dificultades y tragedias provocadas por la guerra de agresión de Rusia (...) Y, sin embargo, los ucranianos están reformando profundamente su país, incluso mientras libran una guerra que para ellos es existencial".
