Los mercados accionarios en Estados Unidos arrancaron el mes en baja porque la solidez de los datos conocidos hoy demuestra que la Reserva Federal deberá seguir ajustando la política monetaria lo que podría provocar una fuerte desaceleración del nivel de actividad.
De acuerdo al instituto ISM, el indicador PMI industrial elaborado sobre la base de la información suministrada por los gerentes de compra de las empresas, subió de 54,5 puntos en abril a 56,1 en mayo.
Por otra parte, la demanda de empleados se mantuvo elevada en mayo, se estima que los pedidos iniciales de subsidios por desempleo en la semana que concluyó el sábado 28 siguió en torno a los 200.000 y el viernes los datos del mercado de trabajo darán cuenta de una creación de empleos algo inferior a los 400.000 con la tasa de desocupación reduciéndose al 3,5%, el mismo nivel que tenía antes de que se desatara la pandemia.
A su vez, el llamado Libro Beige que recopila distinto tipo de información en los doce distritos que componen el sistema de la Reserva Federal mostró que la economía sigue creciendo a un ritmo modesto, pero las empresas enfrentan complicaciones por la inflación y las dificultades para conseguir empleados.
Por otra parte, el CEO del JPMorgan, Jamie Dimon, sostuvo que los inversores deben prepararse para un “huracán” en la medida en que la economía enfrenta una combinación de dureza monetaria e incertidumbre por la invasión de Rusia a Ucrania. De todas maneras, Dimon, que no se caracteriza por acertar con sus pronósticos, evitó hacerlos con claridad en esta oportunidad.
Claro que no son tiempos sencillos ara hacer pronósticos económicos y la propia secretaria del Tesoro, Janet Yellen, reconoció hoy en una entrevista en CNN que en su momento se equivocó sobre el rumbo que tomaría la inflación porque no consideraba que se aceleraría como lo hizo. También en ese momento, Jerome Powell sostenía que la elevada inflación era un fenómeno transitorio, pero por supuesto nadie esperaba el ataque de Rusia a Ucrania.
La reunión de ayer entre Powell y Joe Biden que no se veían desde noviembre es una prueba de que la inflación es hoy la principal preocupación de las autoridades y el mayor motivo de malhumor social.
