Ya es casi un hecho que el Gobierno irá a las elecciones en un clima económico malo. La única duda parecería ser si ese clima será "solo" malo o muy malo. El comportamiento del dólar determinará eso último.
En el oficialismo lo saben y, por lo bajo o no ya no tanto, reconocen que podrían llegar a quedar terceros en las PASO, detrás de JxC y LLA.
Según Ignacio Labaqui, es una estrategia similar a la usada hace 20 años con Carlos Menem y Ricardo López Murphy para beneficiar a Néstor Kirchner. "Hoy se busca instalar algo similar: el miedo a un primer y segundo puesto entre un libertario y una precandidata de Juntos genere el temor 'a la derecha' y eso favorezca el crecimiento de un candidato 'moderado' del FdT", dijo en sus redes. Hoy: ¿Javier Milei, Patricia Bullrich y Sergio Massa?
Más allá de eso, el hecho de un oficialismo tercero es verosímil, y ese es el dato político del momento.
"Nadie sabe quién ganará, solo sabemos quién perderá", dice Carlos Fara.
Eso es consistente con el desempeño de la economía, aunque esa no sea la única explicación del derrotero del FdT. ¿Toda la derrota de 2021 fue atribuible a la economía?
Además, las novedades del primer trimestre -la sequía, como dato central- fueron muy malas: la economía llegará con más inflación y menos nivel de actividad.
Los analistas privados estimaron que el índice de precios al consumidor registró, en marzo, un incremento de 7%, tras el alza de 6,6% registrada en febrero pasado, según los resultados del Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) elaborado por el Banco Central (BCRA). El Indec publicará su IPC el viernes 14.
Para Massa es una derrota clara y la tenue desinflación del último bimestre de 2022 (4,9% en noviembre y 5,1% en diciembre) ya es parte del pasado.
En el mercado proyectan una tasa de inflación arriba de 6% hasta que da la vista: sería 6,3% en abril; 6,1% en mayo; 6% en junio y julio; 6,1% en agosto (mes de las PASO) y 6,2% en septiembre.
Será muy difícil que el FdT tenga alguna competitividad electoral con estos números. Si prima el "voto bolsillo", el castigo al Gobierno será importante.
- Para 2023, la expectativa es que la inflación sea de 110%, casi 15 puntos superior a la de 2022 y 50 puntos más que la que proyecta el Gobierno en su Presupuesto. Además, una suba de 10 puntos versus el REM de febrero.
Pero, además de eso, la situación para la economía real se complicó, y bastante. Ya quedaron atrás las ilusiones de crecer por tercer año seguido. Ahora, el REM pronostica una recesión con una caída del PIB de 2,7%.
Como señala un nuevo informe del Ieral, la economía parece entrar a "una especie de 'etapa superior de la estanflación'".
- En febrero, la industria cayó 1,4% interanual y la construcción se derrumbó 6,3%.
Si esto se empieza a filtrar al mercado laboral, el problema será mayor.
La economía llegará a las PASO en recesión porque ya cayó 1,5% trimestral en el cuarto trimestre de 2022. Volverá a caer en el primero de 2023. Eso se anunciaría el 23 de mayo.
- El 27 de septiembre, el Indec informará qué está pasando con la pobreza en este semestre.
Sobre ese dato, Jorge Colina (Idesa) dijo: "Este dato va dar alto porque el semestre comienza con la Línea de Pobreza escapada de los salarios informales. Justo cuando falte un mes para las elecciones generales, que serán el 22 de octubre. Parece una tragicomedia".
Agrega: "Una gestión que asume el Gobierno con una inflación de más del 50% y termina por encima del 100%, donde lo único que se creó es empleo informal, cuyos ingresos son muy precarios como para acompañar una inflación tan rampante, no es paradójico que termine con una mala noticia de pobreza justo antes de las elecciones presidenciales".
Coinciden en Ecolatina: "Para el primer semestre del 2023, el panorama se complejiza más aún. En la primera mitad del año, los tres principales frentes que determinan la tasa de pobreza (empleo, inflación, ingresos) empeorarían respecto a lo observado en el segundo semestre anterior (...) En suma, veremos una nueva suba en la pobreza en el primer semestre del 2023 -probablemente por encima del 40%- pero esta vez no sólo explicada por el deterioro de los ingresos reales, sino también por la recesión económica. Además, la acumulación de años de empeoramiento de los ingresos reales en un contexto de una economía con alta inflación hace pensar que se fue consolidando un piso de pobreza cada vez más alto y difícil de romper en el mediano plazo, aun recuperando el crecimiento económico".
- En el frente cambiario, el nuevo dólar a $300 eleva las probabilidades de llegar a las PASO sin tener que soltar el dólar oficial. Aunque no se descartan ajustes en el "dólar Ezeiza".
"Adelantar ventas seducidas por un precio de $300 por dólar no resuelve nada. Cuando a mitad de mayo cese este programa probablemente el Banco Central volverá a ser vendedor neto. Tiene algo más de chance de llegar a las PASO sin devaluar el dólar oficial (A 3500), pero los números son finísimos. Si el mundo se terminara en abril, la medida sería acertada. Pero asumiendo que continua, no agrega. Podría muy en el margen persuadir a algún productor que quería aguantar la soja frente a una eventual devaluación. Pero no mucho más", dijeron en Econviews.
"En lo que queda del año, elecciones mediante, claramente vamos a estar con el agua al cuello en términos de reservas. Posiblemente haya meses donde las netas queden negativas y luego se recuperen. De todas maneras, por ahora el gobierno parece que puede llegar a terminar su mandato sin devaluar. La tarea quedará pendiente para quien asuma el 10 de diciembre", dijeron.
"La pregunta atrevida es cómo llegan desde las PASO a diciembre. La paradoja es que si el Gobierno pierde por goleada en agosto, quizás el mercado sea el que ayude a llegar. Si las PASO salen parejas, no sé de dónde sacará dólares el Gobierno para no devaluar", dijo Andrés Borenstein en su podcast "La economía en 3 minutos".
Más allá de que la situación económica y un oficialismo que tampoco juega bien en lo político ni discursivo parecen conjugarse en un escenario fatalista para el peronismo, faltan 130 días para las PASO y en el escenario preelectoral no hay candidatos de más de 35% de intención de voto; hay peleas internas en JxC; Javier Milei y LLA siguen siendo un enigma (esto no implica desmerecerlos) y el Gobierno tiene algunas cartas para jugar.
