Con tantas plataformas de streaming a nuestra disposición, puede parecer casi imposible decidirse por algo para ver durante el fin de semana.
Por eso reunimos en una selección especial las mejores series y películas, que incluye también estrenos en salas de cine, para convertir ese menú interminable en un problema del pasado.
Estas son las series y películas para ver en el fin de semana en Netflix, Prime Video, HBO Max, Star +, Mubi y CineAr.
1. Miniserie para ver en Prime Video: El enjambre: obsesión asesina
La pobre Dre está obsesionada con una cantante pop del estilo Beyoncé, informada de cada instancia de su vida. Es parte de una comunidad online llamada la Colmena en la que intercambia con otros fanáticos, y es capaz de cualquier cosa por conseguir una entrada a sus recitales, algo que su escaso sueldo como empleada en un shopping no le permite.
Pero algo falla en su psiquis: ante un comentario, un tweet, un posteo adverso hacia su adorada, Dre es capaz de reaccionar de la manera más cruda. Sus desventuras la llevan a atravesar el país, dejando un reguero de muertes a su paso.
Esta sátira sobre el culto a los ídolos y la interacción a través de las redes sociales, acierta en el retrato de su protagonista, interpretada por Dominique Fishback, que pivotea entre estados catatónicos y otros de ansiosa hiperactividad. Hay que verla bailar un tema lento de su adorada en un antro de strip tease con el entusiasmo de una osa en hibernación, o macheteando un cuerpo que tiene el doble de su volumen como quien pica cebolla.
Resultan muy angustiantes y divertidos los intentos de una comunidad de mujeres liderados por Eva (Billie Eilish, en su debut como actriz) por hacer de Dre una devota seguidora, o la forma en que la muchacha termina los problemas entre Hailey (Paris Jackson, la hija de Michael) y su pareja tóxica. Creada por Donald Glover y Janine Nabers, sus 7 episodios de poco más de media hora son una invitación a disfrutar de un humor negro sin filtros.
2. Serie para ver en HBO Max: Sucesión
La plataforma HBO Max ha comenzado a emitir la cuarta -y última- temporada de la afamada serie. Por lo que se desprende del primer episodio, esta vez los hijos podrían hacerse de su propia empresa y competir y destruir al padre.
Veremos si se alejan de una vez -ya pisan los 40 años- de esta figura omnipotente (Brian Cox), guerrero de muchas batallas, un viejo y frondoso ombú del que se han colgado de una u otra manera. El primogénito (Jeremy Strong) como un hongo que intenta expandirse sobre las raíces del árbol; el otro (Kieran Culkin), como una lasciva enredadera que sube por el tronco. La hija (Sarah Snook), una conejita que intenta cobijarse en los numerosos huecos de la madera.
Las dinámica familiar de este empresario de los medios sigue enredada con los negocios, y los satélites se guarecen en busca de un lugar bajo el sol: tanto el sobrino nieto (Nicholas Braun) como el yerno (Matthew Macfadyen), dos de los relevos tragicómicos que aflojan la tensión en su bizarra competencia por agradar, quieren asegurarse de que los cambios no los dejen en el descampado.
Así es como entre muchas agachadas de miembros veteranos del emporio y mucho diálogo entrecortado, lleno de sobreentendidos, ampulosas locaciones, sobrias oficinas, fiestas tristonas, mujeres bellas y serviciales, los Roy siguen navegando y dejan una estela entre cínica y preocupante. No por nada se lee en las noticias que muchos famosos están viendo la conveniencia de desheredar a sus hijos.
3. Miniserie para ver en Netflix: Waco: el apocalipsis texano.
En tres episodios, asistimos en primera fila a la tragedia de Waco, en Texas, cuando el gobierno de Estados Unidos, a través de las fuerzas de orden público y el ejército, asediaron el complejo que pertenecía al culto religioso conocido como Davidianos, dirigidos por un chiflado llamado David Koresh, entre el 28 de febrero y el 19 de abril de 1993.
La miniserie estrena en pantalla metros y metros de filmaciones de los periodistas que estaban en el lugar, junto con orgullosos francotiradores del FBI y nostálgicas sobrevivientes del culto, que aún profesan un amor incondicional por su líder. El asedio terminó en un incendio que resultó en la muerte de 76 davidianos, incluidos 25 niños, dos mujeres embarazadas y el cabecilla David Koresh.
También hay espacio para especulaciones: ¿quién disparó primero, las fuerzas del orden o algún miembro de la secta? ¿Quien inició el incendio? Todavía existen dudas al respecto. Lo cierto es que el material registrado durante el asedio es excelente y transmite a los espectadores mucha de la ansiedad de los participantes bajo la lluvia de balas. Y algunos entrevistados parecen necesitar, todavía, hoy día, un chaleco de fuerza.
4. Miniserie para ver en Star +: Ringo: gloria y muerte
Bienvenida esta recreación de la vida de uno de los grandes ídolos populares del boxeo: Oscar "Ringo" Bonavena fue una figura habitual en la cultura popular argentina desde mediados de los años 60 hasta su muerte, en Reno, Nevada, en 1976.
En 7 episodios de media hora se nos muestran sus inicios en el boxeo, varias de sus peleas, sus intervenciones en el mundo del espectáculo - como cantante, actor en el teatro de revistas, como entrevistado en Sábados Circulares-, la vida familiar, la relación tensa con su manager Tito Lectoure.
Famoso por sus fanfarronadas, la risa franca y pueril, era un muchacho de clase media nacido en el barrio de Boedo que llegó a cumplir el sueño de combatir contra Cassius Clay (para entonces "Muhammad Ali") en el Madison Square Garden en 1970, y que profesaba un amor incondicional por su madre y los ravioles que preparaba.
La miniserie dirigida por Nicolás Pérez Veiga destaca por el detallismo de la reconstrucción de época y la calidad actoral. Jerónimo Bosia logra una sólida composición del afamado personaje, acompañado por la malhadada María Onetto como su madre, doña Dominga; Pablo Rago como el entrenador; Delfina Chávez como su esposa Dora.
Los dos primeros episodios no tienen el dinamismo esperado; la decisión de alternar el relato de su ascenso a la gloria con el de su ocaso (los últimos tres meses de su vida en Reno, su relación con el mafioso Joe Conforte y su esposa Sally) no fue la más atinada desde el guion. Poco de lo que ocurre en Estados Unidos es tan atractivo e interesante -se ha visto en decenas de películas de segundo orden- como lo que sucede en Argentina. Sorteado ese obstáculo, esta biopic de Bonavena se ilumina, recupera un ritmo sostenido sin desmayos, nos deslumbra con escenografías espectaculares y muestra combates boxísticos muy bien escenificados.
5. Película para ver en Mubi y Cine.ar: El silencio es un cuerpo que cae
Uno de los mejores documentales nacionales de la última década tiene puntos en común con la recientemente recomendada Aftersun, sobre todo en lo que hace a la reconstrucción de una figura paterna por parte de su hija.
Una cámara de video ausculta el David de Miguel Ángel con curiosidad glotona para descender hacia una mujer y una niña que sonríen receptivas hacia quien la empuña. Ese barrido desde el hombre ideal del Renacimiento hasta la esposa y la hija esquematizan el desplazamiento entre el deseo por los hombres entre los años 70 y mediados de los años 80, hasta el enclave en el matrimonio hetero normado de Jaime Comedi, un abogado reconocido de Córdoba, fallecido en 1999.
Indagando entre cientos de horas que su padre registró en video, realizando entrevistas a familiares y conocidos, reconstruyendo poéticamente en super 8 los huecos que el pasado silenció, Agustina Comedi, aquella niña junto a su madre, Monona, es ahora quien empuña la cámara que reproduce, reforma, interviene e interpela las imágenes heredadas.
Compañeras lesbianas del pasado de Jaime como militante comunista mencionan la esquizofrenia de pertenecer a esas organizaciones de izquierda, donde se pujaba por la liberación de los oprimidos por el imperialismo y se velaba cualquier disidencia del modelo hegemónico heteronormativo.
Otros, sin mostrar el rostro -siguen aprisionados por barrotes invisibles- recuerdan que tuvo su primera pareja con un juez, cuando tenía 16 años, que lo instó a que estudiara. Nos enteramos también de que el testigo de casamiento con Monona fue su pareja durante 11 años y el obstetra que ayudó a traer al mundo a la directora. La esposa recién se enteró del pasado del marido años más tarde, a través de un anónimo...
Lo cierto es que Jaime se casó y ese pasado quedó silenciado, por él, por los demás, hasta que removiendo debajo de las piedras Agustina hizo un poco de luz ante tanta oscuridad. Su ensayo es bello, triste, irritante de a ratos... Vale la pena adentrarse en él.
