El legislador porteño Gabriel Fuks abandonó el bloque del FpV para formar un nuevo monobloque denominado “Corriente Nacional de la Militancia”. De esta manera el peronismo en la ciudad de Buenos Aires sufre una nueva ruptura. Pero, en este caso, a medias. El legislador en cuestión decidió no unirse a las filas del titular del PJ porteño, Víctor Santa María, figura clave del primer quiebre del bloque, sucedido semanas atrás por tres legisladores.
Una muestra del carácter sui generis de la ruptura es el hecho de que los diputados del Parlasur Agustín Rossi y Daniel Filmus, reconocidos dirigentes kirchneristas, acompañaron a Fuks en el anuncio. Estas participaciones exhiben, de alguna manera, que el alejamiento es parcial. También participó del anuncio Mara Brawer, secretaria de la Mujer del PJ local. En la tribuna, estaban las dos cartas clave que pujan en esta novela. Por un lado Carlos Tomada. Y, por el otro, Santa María.
El exministro de Trabajo es el jefe del bloque FpV en la Legislatura porteña, que sufre el embate de los sectores más ligados al PJ porteño. De hecho, antes de que se oficialice la primera ruptura, Santa María había publicado, en Twitter, una foto con Fucks y los tres legisladores que integran el naciente bloque Peronista (Claudio Heredia, Silvia Gottero y María Muiños). Fucks, finalmente, no se sumó a la creación de la bancada que responde al jefe del sindicato de encargados de edificios.
“No estoy literalmente contento, pero sí estoy de alguna manera tranquilo”, sintetizó Fuks, en el comienzo de su presentación del monobloque. Afirmó que la decisión “es parte de la discusión que hay a nivel interno en el movimiento nacional y popular, no es una situación personalizada ni una lógica de fractura alentada por terceros”. Agregó además, manifestando uno de los detonantes de la ruptura, que “la derrota del 10 de diciembre todavía tiene tela para cortar” y concluyó: “En esta ciudad todavía tenemos elementos para discutir de cómo volver a construir una mayoría”.
A su turno, el excandidato a jefe porteño, Filmus, señaló que “hay que tratar de acercar otras fuerzas no solo políticas sino sociales para ver cuál es el modelo de Ciudad que queremos” y agregó: “Que estén hoy todos los compañeros presentes aquí quiere decir que aprendimos algo”, pese a que las caras de los mencionados, en las fotografías publicadas, no exhibían lo expresado por Filmus.
En momentos en los que empieza a discutirse en la Legislatura cuestiones importantes como el Presupuesto, esta ruptura es vista como una buena noticia para el oficialismo. A la ya favorable disposición de las bancas del PRO, se suma ahora una fragmentación creciente de bancas, siempre propicio para negociaciones parciales.
El Frente para la Victoria, que inició el año con doce bancas, está compuesto actualmente por ocho. Otros tres conforman el bloque Peronista y Fuks, la Corriente Nacional de la Militancia.
