El encuentro estaba programado para hoy. En el Consejo Federal de Inversiones del centro porteño. Con un objetivo preciso: definir una estrategia común frente a la demanda del gobierno bonaerense para eliminar el tope en el Fondo de Reparación Histórica del Conurbano, cuyo planteo está en la Corte Suprema de Justicia. El lugar y el temario se mantienen inalterables, pero finalmente la reunión se postergó para la semana que viene. Para sumar adhesiones y llegar al encuentro con una posición en común y suficientemente contundente.
Inicialmente impulsada por gobernadores justicialistas, la convocatoria podría sumar al socialista santafesino Miguel Lifschitz y el rionegrino Alberto Weretilneck. Buscan una salida política ante el posible fallo de la Corte en favor del gobierno de María Eugenia Vidal y pretenden llevar una propuesta consensuada para negociar con Nación. Una llave posible es la continuidad del impuesto al cheque, renovación que dependerá de los votos de diputados y senadores nacionales, que en muchos casos responden directamente a los gobernadores. El nivel de coparticipación del impuesto entra en el mismo paquete: actualmente se distribuye entre las provincias solo el 30% del total.
Vidal presentó el año pasado una demanda ante la Corte para pedir la eliminación del tope de $ 650 M del Fondo del Conurbano, una cifra impuesta en 1995. Si el reclamo avanzara, obtendría una actualización cercana a los $ 53 mil M
En el Gobierno saben que no hay reforma impositiva posible ni acuerdo fiscal si este frente sigue abierto. Pero también especulan respecto de la situación de debilidad en la que quedaron muchos de los gobernadores tras las elecciones primarias. Sobre todo, los casos del cordobés Juan Schiaretti y el entrerriano Gustavo Bordet, que habían sido los promotores de la iniciativa para bloquear el pedido de Vidal. “No importa el resultado. Pelear el Fondo del Conurbano es mi responsabilidad y obligación. Y debió ser la obligación, incumplida, de los anteriores gobernadores”, señaló Vidal, luego de las primarias.
La cumbre de gobernadores se planteó luego de que fiscales de Estado de distintas provincias mantuvieran una reunión la semana pasada para fijar esa estrategia común. Vidal presentó el año pasado una demanda ante la Corte Suprema para pedir la eliminación del tope de $ 650 millones del Fondo del Conurbano, una cifra que fue impuesta en 1995, por lo que, si el reclamo avanzara, obtendría una actualización del orden de los $ 53 mil millones. Y los mandatarios provinciales pretenden que no se le retaceen recursos.
“Hay una amenaza real, cierta y concreta: nos quieren quitar la plata de los tucumanos. Estamos hablando de cerca de $ 3.500 millones. Es mucha plata; si nos quitan eso ¿cómo hacemos para seguir adelante?”, se preguntó el gobernador Juan Manzur, uno de los más combativos contra la esa posibilidad. Otro de los que levantó el tono crítico fue el chaqueño Domingo Peppo. El viernes pasado, una veintena de fiscales de Estado de todo el país se reunión en el CFI y trazaron los esbozos de algunos argumentos que recorrerán los gobernadores. Por caso, el fiscal de Estado de Entre Ríos, Julio Rodríguez Signes, “fue unánime que ninguna provincia está dispuesta a ceder ni un centavo”.
