El consejo directivo de la CGT se reunió ayer para hacer una evaluación de la ronda de discusiones que entabló durante las últimas semanas con diferentes actores de la sociedadytendrámañanasuComité Central Confederal, del que se espera que surjan definiciones clave para el futuro. La expectativa está puesta sobre la posibilidad de que se convoque a un paro general, aunque algunos sectores ?como el de transporte, clave para una medida de fuerza? ya anticiparon que apoyarán la opción del diálogo. El presidente Mauricio Macri, por las dudas, pidió “prudencia” desde Nueva York.
Uno de los miembros del triunvirato que conduce la CGT, Rodolfo Daer, mantuvo ayer en alto las críticas al Gobierno y dijo que el presidente Mauricio Macri debe “equilibrar el peso de la carga de sus políticas económicas y no volcarlas enteramente sobre los trabajadores”. Asimismo, consideró que “todos estamos cada vez más pobres”.
De todos modos, en los últimos días algunos sindicalistas salieron a bajarle el tono a la convocatoria a un paro nacional que ya estaba virtualmente lanzado. Omar Maturano, secretario general de la Unión Ferroviaria, dijo que la intención de los gremios que integran la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) es lograr un “acuerdo social”, con participación de “todas las partes de la sociedad”. En este marco, se mostró partidario de “esperar hasta fines del mes de octubre” antes de impulsar una medida drástica.
La posición no es unánime, dado que otros sectores que participarán del comité ?como la Corriente Federal que integran los bancarios de Sergio Palazzo? demandan, sin matices, el llamado a un paro nacional.
El secretario de prensa de la CGT unificada, Jorge Sola, advirtió que el Comité Central Confederal será el que “decida la medida de acción a tomar, que sería un paro nacional”, y alertó sobre la situación crítica de los trabajadores. “Estamos en una crisis social y económica y no tenemos respuesta positiva de parte del Gobierno. Todos los gremios estamos pidiendo las reaperturas de las paritarias”, señaló Sola al término de la reunión del consejo directivo cegetista.
Macri pidió prudencia
El presidente Macri dijo ayer desde Nueva York que confía “en la prudencia del gremialismo argentino” ante la posibilidad de que la central obrera decida medidas de fuerza mañana y reafirmó que “el camino es el diálogo”.
En la última jornada de su visita oficial a los Estados Unidos para participar de la Asamblea de las Naciones Unidas, el Mandatario sostuvo que su administración hizo “lo imposible para cuidar los trabajos que tenemos”, y se mostró optimista hacia el futuro, al evaluar que se están “empezando a ver las primeras reacciones tras cinco años de no crecimiento y un año de recesión”.
Macri aseguró que el Gobierno “comparte las preocupaciones” de los sindicalistas y que tiene “buena relación con la mayoría de ellos”. “Soy un hombre que viene de la industria, que entiende la importancia que tiene el trabajo, que es la generación de oportunidades y la verdadera solución a la pobreza”, añadió.
Poco después de trascendidas las declaraciones del primer mandatario, el dirigente sindical de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) Mario Caligari se encargó de responderle. “Los sindicalistas siempre fuimos prudentes y no necesitamos ninguna recomendación al respecto”, dijo.
