La relación tuvo varios altibajos durante este año. Puntos de acuerdo y algunas tensiones. Dos momentos en particular sobre las tensiones. Los días posteriores al veto de la ley antidespidos, en mayo pasado, por un lado. Las semanas previas a la discusión por Ganancias, por el otro, cuando el Gobierno y la CGT todavía no habían alcanzado un acuerdo para avanzar con un proyecto y la media sanción en Diputados de la iniciativa opositora preocupaba al presidente Mauricio Macri.
El viernes, al mediodía, el escenario fue otro. En la quinta presidencial de Olivos, Macri recibió a la plana mayor de la central unificada y encabezó un brindis por las fiestas de fin de año, con parte del gabinete de ministros a su lado. Allí estuvieron Héctor Daer, Juan Carlos Schmid y Carlos Acuña, integrantes del triunvirato. Y el líder metalúrgico Antonio Caló; el secretario general de la Uocra, Gerardo Martínez; y el líder de UPCN, Andrés Rodríguez, entre otros. Por el Gobierno, el jefe de Gabinete, Marcos Peña; el coordinador del gabinete económico, Mario Quintana; y el ministro de Trabajo, Jorge Triaca.
En las negociaciones de ese acuerdo, la CGT logró que se la considere un actor privilegiado, además de obtener buena parte de lo que fue a buscar. Y el Gobierno, luego de un inicio de negociación con traspiés, logró que el tema quedara fuera de la agenda política de 2017.
