A falta de confirmación oficial, diversas fuentes han sugerido que esta semana la administración de Joe Biden enviará una delegación de alto nivel de funcionarios del Departamento del Tesoro a China.
Intentando reducir las tensiones entre Washington y Pekín, las reuniones incluirían "conversaciones francas" sobre el uso, por parte de China, de prácticas económicas no de mercado, como los subsidios gubernamentales.
Además, los funcionarios estadounidenses también planean discutir las preocupaciones sobre el exceso de capacidad industrial, que podría inundar los mercados internacionales con productos baratos.
El grupo de cinco personas estará dirigido por Jay Shambaugh, subsecretario de Asuntos Internacionales del departamento, y podría allanar el camino para un segundo viaje a China de la Secretaria del Tesoro, Janet L. Yellen, quien viajó Pekín a mediados de 2023.
Durante las reuniones también se abordarán las formas de resolver la carga de la deuda soberana que afecta a los países de bajos ingresos, ya que hoy en día China es uno de los mayores acreedores del mundo.
Por otra parte, en términos más generales, los dos gobiernos discutirán las perspectivas macroeconómicas de sus países y los esfuerzos mutuos para combatir el cambio climático.
La semana pasada, el FMI proyectó que la economía de China crecería 4,6 % en 2024, aunque la directora, Kristalina Georgieva, dijo que "sin reformas, existe el riesgo de que el crecimiento chino caiga por debajo del 4 %".
