El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lanzó formalmente su campaña para la reelección de 2020 este martes, presentándose como el mismo outsider político que sacudió al establishment de Washington hace cuatro años y que ahora es víctima de un intento de expulsión por parte de los demócratas.
Junto con la introducción del vicepresidente Pence, los comentarios de Trump insistieron en lo que creen que es su problema más importante: convencer a los votantes de que la agenda progresista de largo alcance de los demócratas es similar al socialismo y debe ser rechazada por completo.
"Un voto para cualquier demócrata en 2020 es un voto para el auge del socialismo radical y la destrucción del sueño americano", proclamó Trump.
Con un mitín colmado en un estadio en Orlando, Florida, Trump dejó claro que se presentaría a la reelección como un outsider, tal como lo hizo en 2016, pese a que ya ocupa un cargo desde hace más de 2 años.
En su discurso, revisó los temas de la campaña de hace cuatro años, denunciando nuevamente la inmigración ilegal, los medios de comunicación y su oponente demócrata de 2016, Hillary Clinton.
Dijo que, en los años que han transcurrido, prácticamente había transformado Washington, sometiendo a “una clase política corrupta y disfuncional” y restaurando un gobierno “de, para y por el pueblo”.
También se ocupó de sus rivales demócratas a quienes tildó de radicales y de “traicionar a la clase media americana” con su “política de fronteras abiertas” que buscarían legalizar a los migrantes que cruzan la frontera sur para que puedan votar e impulsar la base política demócrata.
Nombró el muro que prometió hacer en México, aseguró que se estaba construyendo, pero no dijo mucho más, bloqueado como está el proyecto por el Congreso.
"Los demócratas quieren destruir nuestro país como lo conocemos y eso no va a suceder. Creemos que nuestro país debe ser un santuario para los ciudadanos respetuosos de la ley, no para los extranjeros criminales", dijo.
Más de 20 demócratas compiten por la nominación de su partido para enfrentarse a Trump en las elecciones de noviembre de 2020. Muchos de los principales demócratas lideran junto a Trump las principales encuestas de opinión en los estados más importantes.
La campaña de Trump viene recolectando una cantidad extraordinaria de datos de votantes en sus mitines, en este caso uno de los objetivos fue reunir la mayor cantidad posible de información de los votantes de Florida, para que la estrategia en el estado clave se pueda ir planificando.
También estos mitines tienen un gran valor para la operación digital de Trump, la recaudación de fondos en curso y, en última instancia, para la futura votación.
Antes determinar su discurso, Trump les pidió a los participantes del acto que eligieran entre las dos opciones en cuanto al eslogan de campaña. Le preguntó a la multitud si debería apegarse a su eslogan de “Devolvamos la grandeza a Estados Unidos”, o mejorarlo. Su nueva consigna de campaña “Mantener la grandeza de Estados Unidos” (Keep America Great) fue recibida con más bullicios que aplausos, pero terminó imponiéndose.
"Lo siento, MAGA!", dijo.
El Amway Center estaba repleto a una capacidad de 20.000 personas, lo que el director de campaña de Trump, Brad Parscale, dijo que era su mayor manifestación bajo techo en la historia, con muchas personas haciendo fila con anticipación para obtener un asiento, incluso a pesar de las fuertes lluvias.
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