Los precios a los productores en China subieron 12,9% anual en noviembre, mostrando una leve desaceleración frente al 13,5% registrado en octubre que fue su mayor nivel en 26 años. Los analistas atribuyen el resultado a la moderación del precio de la energía y de algunas commodities.
A su vez, el índice de precios al consumidor subió 2,3% con relación al mismo mes del año pasado mientras que en octubre había sido de 1,5%. En ese comportamiento influyó el alza de los alimentos.
La brecha entre el incremento de los precios en las puertas en las fábricas y los que enfrentan los consumidores ha sido una constante en los últimos tiempos y los productores tuvieron que absorber los mayores costos sin poder trasladarlos porque la demanda que está contendida como consecuencia de las restricciones que impuso el Gobierno por el Covid.
Según los analistas del mercado, los datos de inflación le darían margen al Banco del Pueblo para poner en marcha políticas monetarias expansivas que impulsen el nivel de actividad. Sería una estrategia a contramano de las que están instrumentando otros bancos centrales, pero el gobierno de China procura limitar la ralentización del PIB que podría pasar de una suba de más de 8% este año a otra en torno al 5% el que viene.
Para Goldman Sachs, los precios minoristas se mantendrán relativamente estables en los próximos meses mientras que la inflación para los productores se seguirá moderando.
