Cuando Donald Trump era presidente de Estados Unidos, una de sus mayores quejas era que la Organización Mundial del Comercio (OMC) hacía poco y nada para impedir los abusos que cometía China. Por ello, él mismo decidió ponerse manos a la obra e inició una histórica guerra comercial.
Pero, mientras Trump parece encaminado a ganar las internas republicanas y ser nuevamente candidato presidencial en 2024, un panel de resolución de disputas de la OMC concluyó este miércoles que China había actuado de manera inconsistente con sus obligaciones en el marco de la OMC al imponer aranceles adicionales a ciertas importaciones estadounidenses en respuesta a los aranceles estadounidenses sobre el acero y el aluminio.
La oficina del Representante de Comercio de EE. UU. comunicó que estaban satisfechos con la decisión de la OMC y agregó que China había "tomado represalias ilegalmente con aranceles de 'salvaguardia' falsos".
Por su parte, el Ministerio de Comercio de China informó que tomó nota de la decisión del panel de la OMC y exigió que Estados Unidos levante de inmediato los aranceles impuestos a las importaciones de acero y aluminio.
EE. UU. impuso un arancel del 25% sobre las importaciones de acero y un arancel del 10% sobre las importaciones de aluminio en marzo de 2018 con base en la investigación de seguridad nacional de la "Sección 232" de la administración de Trump sobre las importaciones de acero y aluminio.
El grupo especial recomendó que China pusiera en conformidad sus "medidas incompatibles con las normas de la OMC".
Sin embargo, la decisión está lejos de representar un triunfo para Estados Unidos, ya que Pekín podría apelar el fallo, lo que lo enviaría a un vacío legal porque Washington ha bloqueado los nombramientos para el Órgano de Apelación de la OMC, y esto lo vuelve incapaz de emitir un juicio.
La OMC dictaminó el año pasado que la medida de Estados Unidos también había violado las normas comerciales internacionales, y Washington apeló la decisión.
En respuesta a los aranceles estadounidenses, China anunció que se aplicarían aranceles adicionales de entre 15% y 25% a ciertas importaciones originarias de EE. UU., medida impugnada por Washington.
Estados Unidos acordó eliminar los aranceles a las importaciones de la Unión Europea en 2021, pero la administración del presidente Joe Biden mantuvo los aranceles a los metales, que fueron una de las piezas centrales de la estrategia America First de Trump.
