Tras varios días de incertidumbre, el presidente Emmanuel Macron comienza a respirar más aliviado de cara al balotaje del próximo domingo.
Según tres encuestas, Macron alcanzaría un puntaje promedio del 55,83%, casi un punto porcentual más que el pasado viernes y tres puntos más respecto a los sondeos que se realizaron antes de la primera vuelta.
Una encuesta de Ipsos le dio al mandatario una intención de voto del 56,5%, mientras que los sondeos de Opinionway e Ifop le dieron 56% y 55%, respectivamente.
Para mejorar la imagen de Macron, una de las estrategias del oficialismo ha sido desprestigiar a la derechista Le Pen por sus vínculos con el presidente ruso Vladimir Putin.
Ayer, el ministro de Finanzas, Bruno Le Maire, dijo que, si Le Pen es electa presidenta, "entregaría la soberanía de Francia a Putin y a Rusia".
Las acusaciones están relacionadas con que, en el pasado, Le Pen ha expresado su admiración por el líder ruso, además de advertir que sacaría a Francia de la OTAN.
Por otra parte, una de las grandes cuestiones es qué harán los votantes del izquierdista Jean-Luc Mélenchon, quien en la primera vuelta terminó tercero con más del 21% de los votos.
Esta semana, Mélenchon volvió a insistir en que “se cometerá un error colosal si vota por la señora Le Pen. No les digo que voten por Macron, busquen en sus cabezas qué es lo mejor, pero no hagan esto”. Según una encuesta de Elabe, el 42% de sus votantes apoyarían a Macron.