El año pasado, y por primera vez en su historia, Estados Unidos se convirtió en el mayor exportador de gas natural licuado (GNL), superando los envíos de gigantes en el rubro como Australia y Qatar.
En total, Estados Unidos exportó 88,9 millones de toneladas métricas de GNL en 2023, mientras que Qatar, el principal proveedor en 2022, vio cómo sus volúmenes se redujeron por primera vez desde 2016, con un descenso del 1,9%.
Incluso, debido a esta caída, Qatar fue superado por Australia y quedó en el tercer puesto de los envíos de este combustible.
Como era de esperar, el principal destino de las exportaciones estadounidenses fue Europa, ya que el Viejo Continente continúa con su objetivo de reducir su dependencia del gas ruso, mientras que Asia fue el segundo mercado que más GNL estadounidense adquirió.
En este sentido, los Países Bajos, el Reino Unido y Francia fueron los principales destinos del Viejo Continente que más GNL estadounidense compraron.
En total, las exportaciones estadounidenses de GNL aumentaron 14,7% y se vieron impulsadas, principalmente, por el regreso a la producción total de la planta de Freeport que había sufrido un incendio en 2022.
Sin embargo, pese a las increíbles cifras, lo mejor podría estar por venir para EE.UU., ya que Venture Global LNG va a poner en marcha una nueva instalación de GNL en Plaquemines, Luisiana; mientras que ExxonMobil y QatarEnergy inaugurarán Golden Pass, una instalación en Texas.
Así, según la Administración de Información Energética (EIA), las exportaciones estadounidenses de GNL aumentarían este año hasta los 12.360 millones de pies cúbicos diarios, frente a los 11.810 millones de 2023 y los 10.590 millones de 2022.
