Los datos de actividad de China conocidos este lunes superaron los pronósticos de los analistas. La producción industrial creció 7% en el periodo enero-febrero con relación al mismo bimestre del año pasado.
La inversión en activos fijos se aceleró al 4,2% frente a los meses iniciales de 2023 mientras que las ventas minoristas subieron 5,5%, por debajo del año pasado, pero en línea con lo esperado por el mercado.
- La expansión industrial se relaciona con el crecimiento de las exportaciones que fue de 7,1% en el mismo período según se informó a principios de mes.
Con estos datos, los analistas estiman que no serán necesarias por ahora nuevas medidas de estímulo para que el Gobierno alcance el objetivo de crecer 5% este año. Esto a pesar de los desequilibrios que subsisten en el sector inmobiliario.
- Para la actividad económica global, el crecimiento de China es clave.
Si bien las noticias para la segunda economía del mundo son positivas, no ocurre lo mismo en el caso de la tercera.
En Alemania, tanto las autoridades como institutos privados consideran que la economía va a sufrir una contracción en el primer trimestre del año.
De esa manera, entraría en una recesión técnica dado que el PIB también cayó en los últimos tres meses de 2023.
- El mercado espera una recuperación muy lenta en los próximos trimestres por lo que el crecimiento sería muy bajo este año.
A su vez, en Brasil, el Indice de Actividad Económica que elabora el Banco Central subió 0,60% en enero con relación a diciembre superando las expectativas. Este indicador anticipa en buena medida el buen desempeño que puede tener el PIB en el primer trimestre.
Los analistas del mercado proyectan un crecimiento apenas inferior al 2% este año, pero par ale Gobierno se ubicará algo por encima de ese porcentaje.
