El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, se ha transformado en el blanco de la oposición tras una serie de anuncios que realizó a principios de la semana.
El lunes, el mandatario comunicó una serie de medidas que buscaban “poner plata en el bolsillo de los trabajadores y los jubilados” para contener el impacto de la creciente inflación.
En este sentido, Lacalle confirmó que, a partir del 1° de julio, se otorgará un incremento del 3% a jubilaciones y pensiones y otro 2% a los salarios de los funcionarios públicos.
Sin embargo, tras realizar el anuncio, el mandatario uruguayo recibió muchas más críticas que halagos, ya que las medidas fueron consideradas insuficientes por la oposición.
Entre los reproches más creativos se destacó el de Gonzalo Civila, diputado del Frente Amplio, que publicó en su cuenta de Twitter: "La definición política de ajustar salarios por debajo de la inflación viene provocando en estos años una pérdida que no se recuperará".
"En un contexto de crecimiento de la economía, la política salarial aplicada ha sido un instrumento de transferencia de ingresos de los asalariados y jubilados al capital. Robin Hood al revés. Mientras la clase trabajadora paga crisis, sectores concentrados aumentan sus ganancias", agregó.
Por su parte, Daniel Caggiani, senador del mismo partido, tuiteó en la misma red social: “Bienvenido el anuncio de incremento de las jubilaciones y salarios, aunque los montos sean insuficientes y recién se cobran en agosto”.
“A este Gobierno le falta un plan de crecimiento e inversión que reactive la actividad económica, genere empleo y mejore salarios y pasividades”, sentenció.
- La inflación en Uruguay se ubicó en 9,38% en marzo.
El martes, la central obrera PIT-CNT criticó que lo anunciado por el Gobierno “no atiende la situación de miles de personas” que “están viviendo una realidad angustiante”.
Lacalle Pou dijo “que el PIT-CNT haya dicho que es insuficiente, no me llama la atención” porque la central sindical "ha tenido una oposición sistemática al Gobierno".
