Pasó una semana muy intensa, en la que el ministro de Economía, Sergio Massa, volvió de Estados Unidos con la promesa y el compromiso, entre otras cosas, de seguir reduciendo el déficit fiscal, tal como quedó plasmado en el Presupuesto 2023.
- Ahora, todas las miradas apuntan hacia la Justicia. Es que el hoy comienza el alegato final de la defensa de la actual vicepresidente de la Nación, Cristina Kirchner, por la causa de “Vialidad”. Se estima que el viernes la expresidente hable ante el Tribunal Oral Federal 2.
Ese mismo día se realizará una movilización de la militancia del Frente de Todos para apoyar a Cristina. Los manifestantes se trasladarán al Congreso si la exposición es por vía remota o a Comodoro Py, si la vicepresidente asiste personalmente.
- Por su parte, el presidente Alberto Fernández asistirá a la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y hoy será recibido por la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva. En el viaje, el mandatario se reunirá también con potenciales inversores petroleros interesados en la zona de Vaca Muerta.
En el frente local, no se descartan anuncios relacionados con el “dólar Qatar”. Cerca de Massa reconocen que las presiones industriales para racionar la salida de dólares por esa vía existen.
- En el ámbito legislativo se destaca la convocatoria de Cecilia Moreau, presidente de la Cámara de Diputados, a los jefes de los bloques para organizar el tratamiento del Presupuesto 2023, que fue presentado el jueves pasado. En la reunión, que será el día martes, también participarán autoridades de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara Baja.
El mismo día, la Comisión de Transportes se reunirá con la de Seguridad del Interior para avanzar en el debate por las propuestas de alcohol cero al volante. Según informaron desde el sitio parlamentario.com, el encuentro tendrá como fin agilizar los trámites y sacar el dictamen para sacarlo al recinto a la mayor brevedad posible.
Radiografía económica
Esta semana se publicarán una serie de estudios económicos de mucha trascendencia. El primero en orden cronológico (martes) y quizás uno de los más importantes, es el informe de avance del nivel de actividad, elaborado por el Indec.
El estudio presentará los resultados detallados del comportamiento de la economía durante el segundo trimestre del año. Se trata de un informe que profundiza los datos relevados dentro del EMAE.
A modo de anticipo, se puede repasar que el Estimador Mensual de Actividad Económica dio como resultado una variación mensual desestacionalizada del 0,6% en abril, una mejora del 0,3% en mayo y un repunte del 1,1% en julio. En todos los casos las comparaciones interanuales arrojan valores de crecimiento mucho más marcados, pero con el atenuante de que en 2021 aún regían diversas restricciones sanitarias por la pandemia del Covid-19.
Desocupación y empleo
El próximo miércoles se darán a conocer los resultados del segundo trimestre del año de las tasas del mercado de trabajo. Los datos, basados en la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del Indec, mostrarán la evolución de la tasa de actividad, la tasa de empleo y la desocupación en Argentina.
Para el economista Carlos Rodríguez, si se mantiene una coherencia con los datos de actividad económica del EMAE, es esperable que se observe una mejora en los indicadores.
Cabe recordar, que en el primer trimestre del año se registró una mejora de 0,2 puntos porcentuales en la tasa de actividad (llegó al 46,5%), un crecimiento de 1,7 puntos en la tasa de empleo (43,3%) y una baja de 3,2 puntos porcentuales de la desocupación (cerró el trimestre en 7%). Eso quiere decir que hay más personas activadas en el mercado laboral y que hay muchos de los argentinos que estaban buscando el año pasado, pudieron encontrarlo en los primeros tres meses de 2022.
Una historia aparte es la calidad de los nuevos empleos, ya que de 600.000 puestos de trabajo que se crearon en el último año, 500.000 son informales, pero de todas formas se trata de valores positivos.
Balanza comercial
El equilibrio de la balanza comercial es siempre una prioridad para el Gobierno, sobre todo en un contexto de escasez de dólares. En líneas generales los resultados han sido positivos a lo largo del año -con algunos períodos de fuertes restricciones a las importaciones-, pero la situación se complicó mucho en los meses de invierno, cuando el Estado se vio obligado a ingresar miles de millones de dólares en combustibles.
Tal es así, que en julio, por ejemplo, el saldo comercial de Argentina fue deficitario en U$S 437 millones. Es decir que salieron más dólares que los que ingresaron. El dato alentador, es que pasados los meses más duros del invierno la balanza total acumulada del período enero-julio siguió siendo positiva en U$S 2.540 millones.
Según datos preliminares que se dieron a conocer la semana pasada, en agosto se realizaron importaciones por cerca de U$S 7.850 millones, un valor que representa una baja del 4% en relación a julio. Las compras de energía habrían disminuido 40% en relación a julio.
Aún no hay datos precisos publicados respecto a las exportaciones, pero desde la consultora LCG estimaron que rondarán los U$S 7.600 millones. De confirmarse ambos valores, el saldo comercial volvería a ser negativo.
Balanza de pagos
El jueves será el turno de la publicación de la balanza de pagos del segundo trimestre del año. En los primeros tres meses del 2022 la cuenta corriente (suma de todas las transacciones de bienes y servicios que se realizan entre residentes y no residentes) dejó como resultado un déficit de US$ 1.130 millones.
Cabe aclarar, que dentro de la cuenta corriente está contemplada la mencionada balanza comercial, que entre abril, mayo y junio alcanzó un superávit de U$S 1.685 millones, pese a que el sexto mes del año fue deficitario por las importaciones de energía. También se toma en consideración la balanza de servicios, la balanza de cuentas y la de transferencias.
En tanto, la cuenta financiera registró un ingreso neto de capitales de U$S 1.589 millones y la cuenta de capital sufrió una caída de U$S 20 millones en los primeros tres meses del año.
La lupa en el bolsillo
Aparte de los informes macroeconómicos, se harán públicos en los próximos días dos estudios que están directamente relacionados con la calidad de vida de los argentinos.
Uno de ellos es el que presenta la medición de la Canasta Básica Total (CBT) y la Canasta Básica Alimentaria (CBA) del mes de agosto. El primero hace referencia al total de gastos que debe hacer una familia tipo para cubrir el 100% de sus necesidades durante un mes (marca la línea de la pobreza) y el segundo se enfoca particularmente en los gastos alimenticios (determina la línea de indigencia).
Hasta julio los valores acumulaban incrementos del 46% y 50% respectivamente. Si ambas canastas se comportan de acuerdo a la tendencia que marcó el IPC, se pueden esperar subas cercanas al 7% en agosto. Así, la CBA llegaría a rozar $53.000 y la CBT pasaría los $119.000.
El segundo informe que se publicará esta semana con el foco puesto en el bolsillo es el de “distribución del ingreso” del segundo trimestre del 2022. Básicamente se trata de un estudio que mide el nivel de desigualdad que existe entre los que más ganan y los que menos tienen en Argentina.
Para determinar la equidad del ingreso per cápita familiar el Indec utiliza el Coeficiente de Gini, un índice que va de 0 a 1, siendo cero la igualdad absoluta y uno la igualdad total. En principio se podría suponer que el valor “0” es el resultado ideal, pero hay varios países que están en esa situación con la mayor parte de su población en “igualdad de pobreza”.
En el caso de Argentina, la última medición dio como resultado un coeficiente de 0,430, un número algo menor al que se había medido en los primeros tres meses del 2021 (0,445).
