Las máximas autoridades de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) se reunieron ayer con el Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero.
Durante la audiencia en Casa Rosada, dijeron desde la CAC, se dialogó sobre la situación actual del sector representado por la entidad, afectado por la pandemia de y las restricciones asociadas, que se sumaron a una crisis macroeconómica iniciada hace tres años y a un estancamiento de casi diez. Asimismo, se hizo mención a la elevada informalidad que se registra en el país, lo que implica una competencia desleal para aquellos que cumplen con sus obligaciones tributarias y previsionales.
Posteriormente, se conversó sobre diversas políticas públicas con impacto sobre las empresas y la economía en general. En primer término, desde la CAC se manifestó la preocupación por un proyecto del Poder Ejecutivo ?recientemente enviado al Congreso?, que para buena parte de las empresas implicaría un incremento de la alícuota del Impuesto a las Ganancias. Eso, dijeron los comerciantes, desalentará “la inversión, agravando una situación por demás delicada dado el escenario económico actual y la elevada y creciente presión tributaria”.
Asimismo, la CAC planteó la necesidad de establecer medidas para atender a las marcadas asimetrías regionales que registra Argentina, como un régimen análogo al que rigió en virtud del Decreto 814/2001, que implicaba un esquema de crédito fiscal en el IVA por contribuciones patronales con distinciones por zona geográfica.
En el área de Defensa de la Competencia, la CAC reiteró su rechazo a una posible modificación de la ley vigente y considera que el proyecto que recientemente recibió media sanción de la Cámara Alta implicaría un retroceso, ya que prevé eliminar herramientas que han probado ser exitosas internacionalmente para la detección y sanción de acuerdos anticompetitivos.
Simultáneamente, la entidad expresó su preocupación por la falta de avances en el tratamiento legislativo del proyecto para lograr la acreditación inmediata en la cuenta del comerciante de las ventas efectuadas con tarjeta de débito.
Asimismo, la CAC solicitó modificaciones al Repro II para “fortalecer la asistencia laboral que reciben las firmas en dificultades, a la par que se abogó por algunos cambios en lo que refiere a licencias parentales en el marco de la emergencia sanitaria y particularidades del actual ciclo lectivo, a fin de lograr una adecuada conciliación entre la vida familiar de los trabajadores y la operatoria de las empresas”.
Otro tema conflictivo fue el vinculado con el comercio exterior. Los representantes de la CAC dijeron que hay “notorias dificultades para conseguir la aprobación de licencias de importación” y abogaron por “una agilización de estas operaciones”. Asimismo, se sostuvo que resultaría adecuado reforzar el impulso de las exportaciones, tanto desde lo impositivo como a través de otras acciones que faciliten la operatoria.
Por último, la entidad manifestó su acompañamiento al proyecto que prevé modificar el Monotributo y reiteró su acuerdo con la creación de un esquema de transición entre el Régimen Simplificado y el Régimen General, “que atenúe el diferencial actual de imposición que conspira contra el normal crecimiento de las micro y pequeñas empresas”.
Cafiero estuvo acompañado por la vicejefa de Gabiente, Cecilia Todesca Bocco mientras que la CAC estuvo representada por Natalio Mario Grinman (presidente); Alberto Grimoldi (vicepresidente); Rodrigo Pérez Graziano (secretario) y Gonzalo de León (director institucional).
