Dallas Jenkins, el creador de la serie El Elegido (The Chosen) lanzó 5&2 Studios y anunció que hará una serie animada contemporánea a la vida de Jesús, un reality show con Bear Grylls y una nueva serie enfocada en este caso en la vida de Moisés. La semana pasada durante los dos días de Chosen-Con en Orlando, la convención que reunió a fanáticos de la serie, Jenkins reveló el nombre del estudio y sus proyectos, que comenzaran con la serie financiada por crowfunding en 2017 y se transformó en un suceso global.
La distribución de la serie siempre fue autofinanciada al comienzo con una app y los capítulos en YouTube hasta que el éxito logró que la tomara el estudio Lionsgate para estrenarla en cines y venderla a plataformas como Prime Video y Netflix, donde se puede ver al día de hoy.
Una historia (no bíblica) de El Elegido
El Elegido es una serie sobre la vida de Jesús, con la Biblia como referencia, de siete temporadas y de ocho capítulos cada una creada por Dallas Jenkins en 2017 y financiada a través del crowdfunding. Jenkins llevó el proyecto a Angel Studios (ya veremos quiénes son) que a través de su plataforma logró recaudar US$ 10 millones para la primera temporada y 30 para la segunda y tercera. Hasta noviembre de 2002, Angel Studios tenía los derechos de distribución y desde esa fecha, la licencia.
Para 2024, Angel Studios tuvo una ganancia de U$S 100 millones y según el contrato del crowdfunding, los inversores que apoyaron la iniciativa recibieron el monto que aportaron más una ganancia del 20 %.
En mayo de este año, un juez decidió un arbitraje de distribución que Angel Studios pretendía para la cuarta temporada de El Elegido a favor de Jenkins, lo que terminó evolucionando en la creación de su propio estudio y nuevas series, ya independiente de la empresa que lo cobijó todos estos años.
Angel Studios comenzó en el estado de Utah, con mayoría de población cristiana, como VidAngel, una plataforma de streaming, creada en 2014 por los hermanos Neal Harmon, Jeffrey Harmon, Daniel Harmon, Jordan Harmon y Benton Crane, todos mormones, que tomaba las películas de los estudios y las editaba sacándoles el contenido que ellos consideraban censurable, como sexo, violencia o drogas.
El problema fue que esa sanitización era ilegal y Warner Bros., Disney y Fox le hicieron juicio llevando a VidAngel a la quiebra al tener que pagar US$ 62 millones por el uso de contenido de copyright. La empresa se fundió y cambió su nombre por Angel Studios, enfocado en promover contenido cristiano. Independientemente del El Elegido, Angel Studios financió, entre otras, Sonido de Libertad, la película con Jim Caviezel, sobre el tráfico de niños en Centro América, que no estuvo exenta de polémicas y bien vale una nota aparte, como ésta de Pablo Planovsky: Sonido de Libertad: el éxito de la película que reúne teorías conspirativas, religión, la recomendación de Mel Gibson y el apoyo de Donald Trump
Fue durante este torbellino judicial que Dallas Jenkins se acercó a Angel Studios para ofrecerles El Elegido. Jenkins venía de haber creado una productora gracias a su padre. Jerry B. Jenkins, y de haber realizado varios cortometrajes para la iglesia Harvest Bible Chapel con sede en Chicago. Uno de ellos, The Shepherd (El Pastor), tuvo mucho éxito entre los feligreses lo que hizo que Jenkins se envalentonara y llevara el proyecto de El Elegido a Angel Studios cuya primera temporada recaudó U$S 11 millones gracias al aporte de 16.000 personas.
En El Nombre del Padre
El padre de Dallas, Jerry B. Jenkins, junto a Tim LaHaye, escribió la serie de 16 novelas Left Behind, que fueron un éxito en el mundo cristiano entre los 90 y los 2000. Se realizaron cinco películas, una de las cuales fue un reboot con Nicolas Cage en 2014.
La serie Left Behind se puede englobar en el dispensacionalismo, un extremismo cristiano que aduce que estamos actualmente en el fin de los tiempos y que los sucesos históricos contemporáneos son explicados apocalípticamente enfatizando un Dios vengativo y retributivo.
LaHaye, fallecido en 2016, fue un líder religioso que además de escribir 85 (¡!) libros ayudó al cristianismo evangélico a correrse hacia la derecha junto con otras celebridades como Jerry Falwell.
El Elegido
El primer capítulo de la serie comienza con esta frase: "Todo el contexto bíblico e histórico y cualquier imaginación artística están diseñados para respaldar la verdad y la intención de las Escrituras." Acto seguido se toma su tiempo en contar el contexto sociopolítico del momento, la política del Imperio Romano en esa zona y la rebelión por parte de los habitantes por la suba de impuestos.
También describe la persecución a los judíos y las diversas facciones que hay dentro de esa comunidad. No empieza directamente con Jesús sino que vemos al líder religioso Nicodemo (Erick Avari); Mateo (Paras Patel), un recaudador de impuestos, a quien la serie presenta como alguien con espectro autista; Simon, también conocido como Pedro (Shahar Isaac), y su hermano, el melancólico pescador Andrés (Noah James); también está María Magdalena (Elizabeth Tabish), una prostituta alcohólica y adicta. Cuando aparece Jesús (Jonathan Roumie), su versión es mundana.
Obviamente hay escenas de milagros con música sacra y coros pero en su mayoría, la serie busca una visión más naturalista de lo que uno espera de la vida de Jesús.
Todo esto logra un efecto para todo el espectro de público religioso al no inclinarse demasiado hacia ningún extremismo. En Estados Unidos hay tantas comunidades cristianas, cada una con su propia versión de la Biblia, que El Elegido, al ser lo más amplia posible logra contentar a todas sin caer en un línea ideológica clara. Bueno, sí. La ideología que trasvasa es la económica.
El año pasado, durante las huelgas de guionistas y actores que paralizaron Hollywood, El Elegido logró un permiso especial para continuar grabando al ser financiada independientemente y no por los estudios. Y a pesar de los contratos jugosos que con Lionsgate, que también consiguió emitirla en el canal CW, con Prime Video y con Netflix, la serie sigue financiándose a través del crowdfunding. Para la tercera y cuarta temporada el presupuesto saltó de US$ 18 a 40 millones pero los fans siguieron poniendo el dinero. Según el Wall Street Journal, los extras pagaron (no les pagaron) U$S 1.000 por estar en la filmación del Sermón en la Montaña que se grabó en Texas. Un acto realmente de fe.
