Con tantas plataformas de streaming a nuestra disposición, puede parecer casi imposible decidirse por algo para ver durante el fin de semana.
Por eso reunimos en una selección especial las mejores series y películas, que incluye también estrenos en salas de cine, para convertir ese menú interminable en un problema del pasado.
Estas son las series y películas para ver en el fin de semana en Netflix, HBO Max, Star+, Paramount+ y Mubi.
1. Documental para ver en Star Plus: La historia de Brooke Shields
Este documental en dos partes nos muestra a Brooke Shields repasando su trayectoria y contando hechos inéditos de su vida. Desde beba fue modelo, realizando publicidades. A los 10 años su madre autorizó que le tomaran fotos desnuda.
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En su paso por la actuación representó a una prostituta de 12 años en un burdel en Pretty Baby (Louis Malle, 1978); vivió un romance adolescente idealizado y erótico en la exitosa La laguna azul (Randall Kleiser, 1980).
Protagonista de la audaz campaña de jeans de Calvin Klein que impulsó las ventas a niveles siderales. "Novia" de Michael Jackson. Su ingreso a la Universidad de Princeton en pleno auge de popularidad; la posterior debacle económica cuando una vez recibida escasearon las ofertas laborales en el mundo del espectáculo.
La relación de codependencia con la madre alcohólica, que a la vez era su manager. Y un largo devenir que incluye una violación por parte de un ejecutivo hollywoodense y un matrimonio con el tenista André Agassi, tan controlador como la madre.
Con abundante material de archivo, intervenciones de sociólogas y filósofas feministas que ayudan a comprender los distintos procesos de cosificación que sufrió, reflexiones de la misma Shields, las dos horas se pasan volando. Es una colorida cabalgata por una época donde la cultura de la cancelación no existía y las niñas y adolescentes eran exhibidas desde los medios en poses y situaciones abiertamente sexuales para promover el consumo de champús, pantalones y películas.
2. Serie para ver en HBO Max: Hierro
Una novia espera frente al altar. El novio no se presenta. Ha sido asesinado, justo el día que la jueza Candela Montes (Candela Peña) llega a El Hierro. El padre de la novia, Antonio Díaz (Dario Grandinetti) es señalado como responsable de la muerte del joven.
No es para menos, Díaz es envidiado por la mayoría de los lugareños porque es un empresario de éxito, tiene una plantación de bananos. Tanto la jueza como el empresario tienen algo en común que los une: son forasteros
Este thriller logra mantener el suspenso durante las dos temporadas (14 episodios de 40 minutos), porque suma dos investigaciones, la judicial y la que emprende Díaz para lavarse de sospechas, a la fórmula "pueblo chico infierno grande", impuesta por la madre de las telenovelas, La caldera del diablo (1964-1969). Los habitantes de la isla son pocos y están muy interrelacionados.
También hay una conexión con la vecina isla de Tenerife: uno de los negocios oscuros de Díaz lo relaciona con la inquietante Samir (Antonia San Juan, la Amparo de Todo sobre mi madre), que añade una promesa constante de violencia.
Si a los espléndidos paisajes que ofrece la isla, la solidez de los guiones y la profesionalidad de la producción en todos sus niveles se agregan las interpretaciones contundentes de Peña y Grandinetti, el entretenimiento está asegurado.
3. Serie para ver en Netflix: Wellmania
Liv (Celeste Barber) es una crítica gastronómica que vive en Nueva York y es amante de los excesos: le gusta la comida, el alcohol, la cocaína y el sexo al paso en lugares arriesgados en dosis que no son las más recomendables para la salud. Está cercana a cumplir las cuatro décadas y tiene la posibilidad de ser nombrada jurado de un programa tipo Master Chef en la televisión. Pero al ir al cumpleaños de su amiga más íntima en Sidney (de donde es oriunda), pierde la tarjeta verde que le permite vivir y trabajar en los Estados Unidos.
Los trámites para gestionar una nueva no son tan sencillos y a Liv el tiempo la corre porque el programa está a punto de seleccionar a su jurado. Un obstáculo mayor son sus paupérrimas condiciones de salud: no sólo debe bajar la presión arterial y los niveles de colesterol, también ponerse en forma con dieta y ejercicios.
Esta comedia australiana (8 episodios de 25 minutos) es divertida y liviana, por más que de vez en cuando recurra a un humor grueso y escatológico. El personaje de Liv tiene varias facetas y puede ser muy impulsiva, irse de boca, producir situaciones embarazosas entre sus amigos y familiares, pero también tiene un buen corazón y es capaz de animar una fiesta infantil como el mejor de los payasos.
Barber es una gran comediante y saca provecho de su cuerpo y su expresividad facial. Los guiones tienen altas dosis de ingenio en los diálogos y las situaciones suelen ser hilarantes. El ritmo es trepidante y el marco que ofrece Sidney provoca visitarla en las próximas vacaciones. ¿Qué más se le puede pedir al televisor para darle cierre a un día agitado?
4. Miniserie para ver en Paramount +: The Offer
El padrino (1972) es uno de los films más queridos por muchos espectadores y, además de ser muy exitoso, tiene su propia mitología. Francis Ford Coppola construyó una prodigiosa máquina narrativa, apoyado en las glorias visuales del director de fotografía Gordon Willis y con la base de la novela de Mario Puzo, uno de los mayores best sellers de todos los tiempos. Su gestación tuvo que superar numerosos obstáculos hasta que el producto llegó a las pantallas, el 15 de marzo de 1972. Tal proceso es la materia que alimenta a The Offer, la miniserie en 10 capítulos de Paramount +.
Conocidos son los relatos sobre tamaña empresa del propio director y de Robert Evans, director del estudio, responsable de dar luz verde a films como El bebé de Rosemarie e Historia de amor. Si una voz faltaba escuchar era la de Albert S. Ruddy, el verdadero productor de la película. The Offer llena ese vacío y es así como seguimos las múltiples vicisitudes que atravesó guiados por la estampa y prestancia actoral de Miles Teller (Whiplash, The Spectacular Now, Top Gun: Maverick).
A los innumerables pedidos de Coppola, a los intentos de recorte de presupuesto que intentaban los ejecutivos del estudio, interesados en hacer de las películas productos más que expresiones artísticas (la Paramount estaba en manos de una empresa petrolera, la división películas ocupaba una parte minoritaria), se suma que Ruddy también tuvo que enfrentar los requerimientos de la mafia neoyorquina, más precisamente de la familia Colombo.
Los "muchachos" estaban preocupados por la imagen que la película podía crear de ellos y exigieron la lectura del guion, buscando con lupa todo aquello que intentara ridiculizar a la comunidad ítalo norteamericana, acordando finalmente que se suprimiera la palabra "Mafia".
Ruddy cruzó límites éticos al trabar amistad con Colombo (Giovanni Ribisi), provocando la ira de más de un ejecutivo, pero también consiguiendo que los permisos para filmar en locaciones se expidieran sin trabas y los sindicatos no dificultaran la producción.
La ficción que crean los guionistas tiene su punto fuerte en esta relación de la producción de El padrino con la misma Mafia, ya que hay detalles y situaciones que no se conocían en profundidad y son los que aporta la memoria de Ruddy. Otro de los puntales es la creación de personajes vívidos, que alternan frases para la posteridad con situaciones que relacionan las minucias de la producción con sus vidas cotidianas.
The Offer crea un mundo de luces rutilantes que integran la oscuridad del crimen organizado con la naturalidad con que en El padrino se puede matar a un cuñado. Una derivación harto lograda del producto original -hasta vemos cómo se escenificaron ciertas secuencias o cómo hizo Brando para seducir a una platea improvisada en el sofá de su casa y quedarse con ese papel inolvidable-, el grado de verosimilitud que destila permite que olvidemos que se trata de otra iteración de la consigna business is business.
5. Película para ver en Mubi: El fantasma de la libertad
Perteneciente al tramo final de la obra de Luis Buñuel, el padre del Surrealismo cinematográfico, El fantasma de la libertad (1974) propone una purga de tanto relato que sigue un principio, un desarrollo y un final, alterando todas las reglas, brindando una propuesta lúdica que habrá de regocijar a más de uno que la descubra en 2023.
Unos padres pueden ir a la comisaría a denunciar la desaparición de su hija con la niña a su lado, y los policías ponerse a buscarla frenéticamente. Un francotirador que asesinó azarosamente a 20 personas desde un tejado puede ser felicitado en el Palacio de Justicia por su obrar y salir en libertad con toda tranquilidad. Un juez extraña tanto a su hermana difunta que puede visitar la bóveda familiar y tratar de meterse en el ataúd junto a ella.
Buñuel, con un humor y tratamiento leves -hay pocos directores tan ágiles narrativamente como él- denuncia con ojo clínico la naturaleza convencional de muchas de las acciones y situaciones en las que nos movemos de manera cotidiana.
Respaldado por un elenco de notables actores de la época, -entre ellos la divertida Monica Vitti, el aplomado Michel Piccoli-, desafiando los principios de identidad y de contradicción con la simpleza con que un niño recita el abecedario, El fantasma de la libertad puede constituirse en una experiencia grata y en la punta de lanza para recorrer la obra de uno de los mayores talentos del cine moderno.
