El Frente Patria Grande liderado por el dirigente social Juan Grabois lanzó una campaña por el Salario Básico Universal con la pegatina de una serie de afiches en el Area Metropolitana de la Ciudad, tal como había adelantado El Economista, dando un nuevo paso en la escalada de presión sobre la Casa Rosada y la nueva ministra de Economía, Silvina Batakis, para atender la urgencia de la sectores informales. La campaña llega el día después de la conferencia de prensa en la que la ministra de Economía brindó formalmente sus primeras definiciones.
- En Patria Grande creen contar con el guiño de la vicepresidenta Cristina Kirchner luego de que esta dijese en Ensenada estar dispuesta a “debatir” una medida de dicha naturaleza. Sin embargo por ahora la vice, bajó el tono de las críticas.
Con un escenario complejo para el oficialismo en el Congreso, (si bien los diputados de las organizaciones presentaron proyecto), todas las miradas apuntan sobre el Palacio de Hacienda y el presidente Alberto Fernández quien podría establecer la medida vía decreto, escenario que a hoy también se hace difícil de imaginar luego de los dichos de la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti.
La siguiente acción de la campaña de las organizaciones está prevista para mañana, cuando en horas de la tarde se convoque a “asambleas en todos los barrios y espacios de trabajo del país” para debatir el curso de acción en el reclamo por cuatro puntos centrales: 1) Salario Básico Universal para trabajadores informales; 2) Aumento general de salario para empleados públicos y privados; 3) Aumento para jubilados de la mínima; 4) Aguinaldo para cooperativistas de obras públicas y potenciar trabajo.
A Patria Grande se le sumó el diputado Hugo Yasky, referente de la CTA: “Hemos resuelto en el Congreso de la CTA, iniciar una serie de movilizaciones en todo el país para pelear por el salario básico universal, por el impuesto a la renta extraordinaria y para que la deuda la paguen los que la fugaron", sostuvo. Mientras la Ministra hace malabares para administrar el dólar, crecen los reclamos dentro y fuera de la constelación oficialista.
Ayer, el referente y dirigente de ATE, Pablo Michelli, dijo que el discurso de Batakis le hacía recordar a (Domingo) “Cavallo”.
La salida intempestiva de Martín Guzmán abrió una frágil tregua interna entre los principales exponente de la coalición de Gobierno. Ayer, todas vocerías del kirchnerismo consultadas por esta diario mantuvieron silencio luego de la puesta de escena de Batakis destinada a apaciguar la tensión cambiaria.
Sin embargo, en los días previos no dejaban de reconocer que el cambio de “nombre por nombre” en el ministerio de Economía, tenía sabor a poco, y el propio Máximo Kirchner cuestionó a la titular del FMI, Kristalina Giorgieva el jueves pasado, en Escobar.
En ese sentido, se espera que Batakis sea citada a Diputados para exponer sobre el costo fiscal de la moratoria previsional que obtuvo media sanción recientemente en Senado y que jamás fue consultada con Guzmán, tal como expresó la propia Juliana Di Tullio. La titular de la Comisión de Previsión Social (Diputados), es la kirchnerista Marisa Uceda, un dato no menor.
En tanto el titular de la Cámara De Diputados, Sergio Massa, tiene un diagnóstico similar. Planteó días atrás la posibilidad de llegar a la jefatura de Gabinete con el control sobre la botonera de la economía, algo que finalmente no sucedió.
Pero más allá de los deseos no concretados, lo que queda claro es que el líder del Frente Renovador y Cristina comparten la idea de que el rumbo de la economía requiere de un drástico golpe de timón. De hecho ya se lo había conversado con Fernández en su viaje a la Cumbre de las Américas.
En concreto, cuando Cristina y Massa se corren de las críticas, emergen las organizaciones para marcar la disidencia con el rumbo de la economía.
