Cambio de canciller, pero no de política exterior. Ayer, como venía sucediendo durante la gestión de Felipe Sola, Argentina se abstuvo en una votación de la OEA que exigía “la liberación inmediata” de los opositores al régimen de Daniel Ortega detenidos en Nicaragua en la previa de las elecciones de noviembre.
La resolución, en la cual el embajador argentino Carlos Raimundi se abstuvo, fue aprobada con 26 votos a favor, 7 abstenciones y una ausencia. La postura argentina fue acompañada por Barbados, Bolivia, Guatemala, San Vicente y las Granadinas, Honduras y México.
El único ausente, justamente, fue Nicaragua, mientras que los socios de Argentina en el Mercosur, Brasil, Uruguay y Paraguay, condenaron el régimen de Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo.
Esta es la segunda resolución que la OEA aprueba para presionar al régimen nicaragüense y exigirle que libere a candidatos presidenciales y presos políticos. El dictamen anterior había sido aprobado en junio con el apoyo de 26 de los 34 miembros activos del bloque regional. En aquella ocasión, también hubo siete abstenciones, y Argentina, Bolivia y México procedieron de la misma manera.
“El texto en cuestión, si bien contiene elementos congruentes con la posición argentina en lo que concierne a la situación de los derechos humanos en Nicaragua y los arrestos de representantes de la oposición nicaragüenses -como ya lo expresara en el comunicado emitido conjuntamente con México el pasado 15 de junio- sólo parece buscar prejuzgar sobre el desarrollo de un acto eleccionario que aún no ha tenido lugar, al tiempo que invoca distintos estándares internacionales que no son válidos como exigencias a ningún país, más allá de que alguno pueda haberlos adoptado en su legislación interna. La República Argentina entiende que la consideración apresurada de este tema por el Consejo Permanente resulta improcedente y extemporánea, atento a la proximidad de los comicios en Nicaragua y a la inminente realización del 51 Período de Sesiones de la Asamblea General de la OEA -prevista para sesionar del 10 al 12 de noviembre próximo- que ha incluido la cuestión de Nicaragua entre los temas a considerar. Por lo que, más allá de coincidir con algunas de las apreciaciones contenidas en el proyecto, la Argentina votó en abstención en conjunto con otros 6 países”, dijo Cancillería en un comunicado.
La posición de Argentina fue muy criticada por la oposición y, también, en conjunto con la de los otros 6 países, por algunos colegas de Raimundi en la OEA.
En la ONU
Argentina fue reelecta el pasado jueves 14 de octubre como miembro del Consejo de Derechos Humanos para el período 2022-2024 en la elección llevada a cabo en la ciudad de Nueva York, sede de las Naciones Unidas. El grupo de América Latina y el Caribe debía renovar 3 vacantes para el citado período. También fueron elegidos Honduras y Paraguay.
“Agradecemos a todos los Estados Miembros de las Naciones Unidas que apoyaron la reelección de Argentina al Consejo de Derechos Humanos por el período 2022-2024”, afirmó el canciller Santiago Cafiero, y sostuvo: “Hoy reafirmamos nuestro compromiso con la promoción y la protección de los derechos humanos, y asumimos la responsabilidad de seguir aportando iniciativas que eleven los estándares internacionales de protección y contribuyan al desarrollo progresivo del derecho internacional de los derechos humanos”.
