Ramón Lanús, el precandidato a intendente impulsado por Patricia Bullrich en San Isidro, se une a Convocación por San Isidro, partido vecinalista liderado por la quintilliza Catalina Riganti.
Buscan constituir una fuerza con el peso suficiente para ganarle a Gustavo Posse que lleva 50 años gobernando San Isidro. En rigor, a su hija, Macarena, quien buscará continuar el legado de Melchor y Gustavo, que secundará a Diego Santilli en la batalla por La Plata.
"ConVocación es un partido que ha aportado mucho a la discusión local. Con ellos compartimos muchos valores y estamos armando un equipo en el que todos trabajemos juntos para lograr el verdadero objetivo: que haya un gobierno en San Isidro que resuelva el problema de la inseguridad y se ocupe de bajar de una vez los impuestos que ahogan a nuestros vecinos", dijo Lanús.
"En San Isidro hace falta una transformación, por eso es necesario construir una fuerza junto a Ramón con el peso suficiente que permita terminar con un gobierno que ya lleva 50 años.Tenemos vocación de servicio y creemos en una política diferente. San Isidro necesita un recambio generacional en su conducción y terminar con el reinado del Possismo", agregó Riganti.
Además, la alianza incluye expresiones del vecinalismo de Carlos Castellano, expresidente del Concejo Deliberante; así como del radicalismo no possista; Republicanos Unidos, partido liderado por Ricardo López Murphy y representantes de la Coalición Cívica.
"Por primera vez, desde el regreso de la democracia en 1983, los vecinos de San Isidro van a poder optar por una opcion competitiva y no testimonial, surgida del espacio social dominante en San Isidro que en los años electorales encontraba solo la opcion de posse en la oferta electoral. Todo esto enmarcado en el proyecto nacional del cambio que ofrece Patricia Bulrich", explicó un conocedor de la rosca sanisidrense, hoy enrolado en el lanusismo.
Cree, además, que hay margen para que el distrito (uno de los más desarrollados de toda la provincia). "Posse es un muy buen politico, pero un mal intendente. Te doy un ejemplo. Hay una esquina donde siempre hay choques. ¿Que haría un buen intendente si pasa esto? Manda a realizar estudios del flujo del transito, etcétera. ¿Qué hace Posse? Le pregunta a los cuatro frentistas de las esquinas. Uno le pide un semaforo, el otro le pide un lomo de burro, el otro un zorro gris. ¿Cómo termina actuando el municipio? Hace todo eso, malgasta el dinero y no soluciona el problema. Pero el intendente quedo bien con cada uno de sus vecinos. Eso hay que cambiarlo con una gestion que pondere y priorice lo mejor para los vecinos", ejemplicó con una problemática municipal clásica.
