Pese a que el Partido Socialista tiene pocas chances de formar gobierno en España, el presidente, Pedro Sánchez, rechazó la invitación del líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, para conversar esta semana con el propósito de intentar evitar "una situación ingobernable".
Tras las últimas elecciones generales, ni el PSOE ni el PP alcanzaron los 176 escaños necesarios para formar gobierno, por lo que, si la situación no se resuelve a la brevedad, todo hace prever que se celebrarán nuevos comicios en noviembre.
"Una vez finalizado el recuento y como ganador de las elecciones del pasado 23 de julio, acabo de enviar una carta al candidato del PSOE instándole a reunirnos esta misma semana", dijo Núñez Feijóo, en alusión a Sánchez.
Pero tan solo un par de horas después, Sánchez hizo público que declinó la invitación e invitó a Núñez Feijóo a reunirse después del 17 de agosto, una vez que se haya constituido el nuevo Congreso de los Diputados.
Este fin de semana, tras el escrutinio de los votos de los españoles que viven en el extranjero, el PSOE perdió un escaño a manos del PP. Así, el PP pasó de 136 a 137 diputados y los socialistas de 122 a 121.
En caso de que ninguno de los espacios alcance la mayoría absoluta, como se asume, los candidatos pasarán a una votación cuyo requisito es una mayoría simple (más votos afirmativos que negativos), y ya no la mayoría absoluta, aunque esto también parece poco probable por el momento.
