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¿Qué es el sistema SWIFT?

En los conflictos bélicos, la herramienta de disuasión económica por medio de sanciones puede tener una injerencia preponderante

¿Qué es el sistema SWIFT?
¿Qué es el sistema SWIFT? SWIFT
Manuel Ignacio Carreras 04 marzo de 2022

La invasión por parte de la Federación de Rusia a Ucrania generó un sismo en las relaciones entre Occidente y Moscú. Una de las consecuencias inmediatas fue la expulsión de Rusia del sistema financiero SWIFT.

En los conflictos bélicos, la herramienta de disuasión económica por medio de sanciones puede tener una injerencia preponderante. Por ese motivo, Estados Unidos, Canadá, Reino Unido y la Unión Europea decidieron bloquear el acceso a las entidades financieras rusas del sistema SWIFT.

Society for World Interbank Financial Telecommunication (SWIFT) es una organización que opera la red internacional de comunicaciones financieras entre bancos y otras entidades. Brinda un código internacional que presta a sus socios un servicio de mensajería cifrada, la cual permite las transferencias internacionales de fondos.

El sistema SWIFT fue establecido en 1973 en la ciudad de Bruselas, Bélgica. La creciente necesidad de crear un sistema de seguridad en las transacciones urgió a las principales potencias mundiales a formar un sistema que brinde seguridad, automatización, estandarización y sobre todo que sea de bajo coste (contando con comisiones pequeñas, similares a la de los cheques).

Los métodos fundamentales para las operaciones y las reglas de procedimiento se establecieron en 1975 y dos años más tarde, en 1977, el primer mensaje SWIFT fue emitido.

El sistema se ejecuta a través de una junta directiva de 25 miembros en Bélgica, bajo la dirección de bancos centrales nacionales, en donde están la Reserva Federal de Estados Unidos y el Banco Central Europeo.

La creación de un lenguaje común para las transacciones financieras le otorga al sistema financiero internacional las garantías de seguridad indispensables para su correcto funcionamiento.

El SWIFT determina los códigos bancarios (Bank Identifier Code), los cuales se utilizan para identificar al banco beneficiario de una transferencia. El código se compone de un código alfanumérico de 11 caracteres. Los primeros ocho caracteres brindan la información de la entidad y los otros tres caracteres, especifica la información de una sucursal determinada.

Las partes involucradas en el sistema SWIFT componen a un ordenante (importador o pagador, el cual le da las instrucciones al banco solicitando la emisión de la transferencia), el banco emisor (recibe órdenes del ordenante y lo verifica), el banco corresponsal (en el caso de que la transferencia se haga a un divisa distinta a la del país del banco emisor), el banco pagador (entidad en la que el beneficiario tiene la cuenta) y el mismo beneficiario (cobrador o exportador).

El sistema SWIFT representa a más de 11.000 instituciones en más de 200 países del mundo. Contiene sólidos diseños de software junto con un modelo de varios niveles de respaldo y una infraestructura tecnológica de claves públicas que le permite a distintas entidades poder realizar todo tipo de transacciones.

En este marco, la imposibilidad de los bancos rusos de poder acceder al sistema, le genera un enorme inconveniente en su estructura financiera futura. Dejando fuera a empresas e instituciones financieras que se verán imposibilitados de enviar o recibir divisas.

Hasta el momento, la Unión Europea confirmó a ciertas entidades financieras rusas que quedarían excluidas del sistema SWIFT: Bank Otkritie, Novikombank, Promsvyazbank, Bank Rossiya, Sovcombank, Vnesheconombank (VEB) y VTB. Dentro de esa lista no se encuentran ni Sberbank (el banco más importante del país) ni Gazprombank (procesa gran parte de las operaciones en materia de energía con el bloque europeo).

Los efectos para el Estado ruso pueden ser devastadores, ya que podría perder cerca de 5% de su PBI, según el Kremlin, al tratarse de una economía basada en commodities, sobre todo por su gran producción de hidrocarburos, como el petróleo y gas.

Sin embargo, desde Moscú, luego de la anexión rusa de Crimea en el año 2014, con plena consciencia de que un bloqueo de este tipo podría ocurrir, el Banco Central de Rusia diseñó un sistema alternativo al SWIFT, llamado SPFS. 

Dicho sistema no es tan utilizado como el SWIFT, además de que posee costos mucho más elevados. El sistema SWIFT mueve más de US$ 100.000 millones a diario en pagos, lo que la transforma en el líder de este tipo de plataformas.

El antecedente más reciente de un bloqueo a un país del sistema SWIFT ocurrió en 2012 con la República Islámica de Irán. En ese momento, se eliminaron a los bancos iraníes de toda la red internacional SWIFT, debido a las investigaciones realizadas por el país persa para el desarrollo de armas nucleares. Irán perdió el 50% de sus ingresos en petróleo y su comercio exterior se vio reducido en 30%.

La decisión de privar a los bancos rusos del sistema SWIFT no solo traerá aparejadas consecuencias financieras para la Federación de Rusia, sino también para occidente. El peligro del sistema financiero internacional radica en un posible debilitamiento de las dos divisas más utilizadas como son el dólar y el euro. 

Muchas operaciones en dólares no serían posibles de realizar, rompiendo con un eje financiero de las transacciones comerciales. Lo cual podría implicar una migración hacia la utilización de monedas como el yuan chino, como así también la utilización de criptomonedas estables para suplir la demanda transaccional. 

China posee un sistema llamado CIPS (Cross-Border Interbank Payment System), desarrollado en el 2015, el cual varios bancos rusos lo integran, por lo que podría ser otra alternativa de escape para Rusia.

Rusia es el segundo país con más usuarios de SWIFT (el primer lugar lo ocupa Estados Unidos), por lo que lograr sortear este gran bloqueo no será una tarea sencilla. 

Si bien Irán pudo sobrevivir al bloqueo en el 2012 a través del usos de monedas nacionales, oro en transacciones y acuerdos de trueque, nada puede garantizar que el porvenir financiero de Rusia sea prometedor, independientemente de la estrategia que se utilice para abordar este agujero financiero provocado por las sanciones de Occidente.

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