Este lunes, el presidente de España, Pedro Sánchez, mantuvo a Nadia Calviño como su ministra de Economía y casi no efectuó cambios en su nuevo gabinete.
Calviño, favorita para el puesto más alto del Banco Europeo de Inversiones que se anunciará a finales de año, también mantendrá su cargo como vicepresidenta primera.
Sánchez, que la semana pasado fue reelecto por el Parlamento español, tras ofrecerles un acuerdo de amnistía a los separatistas españoles, comenzó su nueva legislatura con un gabinete en el que la mayoría de los ministros de alto rango conservan sus puestos.
Esto sucedió con la ministra de Energía, Teresa Ribera; la ministra de Presupuesto, María Jesús Montero; el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares; y la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.
"Es un equipo político de alto perfil para una legislatura política de alto perfil. Son personas capaces de gobernar, pero también de llegar a acuerdos", explicó Sánchez.
El gobierno de coalición con la plataforma de extrema izquierda Sumar tiene solo 152 escaños en un parlamento de 350 escaños, por lo que necesitará llegar a acuerdos con partidos regionales para aprobar leyes clave, como un presupuesto para 2024 y un aumento del salario mínimo.
Dada la dificultad prevista para aprobar leyes con un gobierno minoritario, la ministra de Presupuesto, María Jesús Montero, será ascendida a uno de los cuatro viceprimeros ministros.
Por su parte, el ministro del Gabinete, Félix Bolaños, asumirá la cartera de Justicia para implementar la ley de amnistía que permitió a los socialistas asegurar otro mandato.
Además, Ana Redondo sustituirá a Irene Montero, del partido de extrema izquierda Podemos, como ministra de Igualdad. Sánchez se mantuvo fiel a su idea de tener más mujeres (12) que hombres (10) en su gabinete y, en total, sumó 9 caras nuevas al gabinete de 22 personas.
Sánchez, al igual que Javier Milei en la Argentina, gobernará hasta 2027. Por ello, una gran incógnita es cómo serán las relaciones bilaterales entre ambos países durante este período, más que nada si se tiene en cuenta que el líder español apoyó claramente a Sergio Massa durante la campaña presidencial argentina.
