Fin de semana de elecciones generales en Polonia y Nueva Zelanda con un resultado similar: la oposición ganó terreno en ambas regiones.
En el caso del país europeo, la oposición liberal y pro Unión Europea parecía encaminada a formar el próximo gobierno después de que resultados parciales oficiales y encuestas a boca de urna mostraran que los nacionalistas gobernantes perderían su mayoría parlamentaria.
El actual partido gobernante Ley y Justicia (PiS) se ha enfrentado repetidamente con la UE por el estado de derecho, la libertad de prensa, la migración y los derechos LGBT desde que llegó al poder en 2015.
Por ello, los partidos de oposición hicieron campaña prometiendo mejorar los vínculos con Bruselas y desechar las reformas que ꟷdicenꟷ han erosionado la democracia polaca.
Una encuesta a pie de urna de Ipsos le dio a PiS el 36,1% de los votos, lo que se traduciría en 196 legisladores en la Cámara Baja del Parlamento, que cuenta con 460 escaños.
Por su parte, los partidos de oposición, encabezados por la Coalición Cívica (KO), grupo liberal del expresidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ganarían un total combinado de 249 escaños, y se estimaba que el KO obtendría el 31,0% de los votos emitidos.
Por otra parte, el conservador Partido Nacional de Nueva Zelanda ganó los comicios celebrados en el país oceánico, lo que le permitirá regresar al poder después de seis años en la oposición.
El Partido Nacional, encabezado por Christopher Luxon, obtuvo aproximadamente el 39,1% de los votos, mientras que el centro-izquierdista Partido Laborista, del saliente primer ministro neozelandés, Chris Hipkins, alcanzó el 26,8% de los sufragios.
Los conservadores podrían formar una alianza con la formación ultra-liberal ACT para gobernar con una débil mayoría.
