El populista de extrema derecha Geert Wilders está muy cerca de ser el próximo primer ministro de los Países Bajos.
Wilders, que obtuvo una histórica victoria en las elecciones holandesas, es un gran admirador del expresidente estadounidense Donald Trump y del primer ministro euroescéptico de Hungría, Viktor Orbán.
Además, es abiertamente antiislámico y anti-Unión Europea, y ya dijo que "los Países Bajos serán devueltos a los holandeses".
Sin embargo, es difícil que pueda lograrlo, puesto que cualquier plan para sacar al país de la UE o prohibir el Corán será rechazado por otros partidos, a los cuales justamente necesita para formar un gobierno de coalición.
El Partido por la Libertad (PVV) de Wilders obtuvo 37 escaños de 150, muy por delante de los 25 de la candidatura conjunta laborista y verde y de los 24 del conservador Partido Popular por la Libertad y la Democracia (VVD), del primer ministro saliente, Mark Rutte.
"Por supuesto, estaría muy feliz de convertirme en primer ministro holandés", dijo Wilders, quien agregó que "estamos ansiosos por hacerlo, porque esta gran victoria en las elecciones holandesas nos da muchas responsabilidades, y realmente queremos estar a la altura".
Además, expresó que estaba a favor de un referéndum sobre si los Países Bajos deberían abandonar la UE, aunque remarcó que "lo primero es una restricción significativa al asilo y la inmigración. No lo hacemos por nosotros mismos, lo hacemos por todos los holandeses que votaron por nosotros".
La migración neta a los Países Bajos se duplicó en 2022 respecto al año anterior hasta alcanzar unas 223.000 personas, según muestran datos de estadísticas de los Países Bajos.
