Pese a las campañas internacionales de concientización y los esfuerzos estatales, privados y sociales, el cambio climático no se detiene. Así lo reveló ayer la ONU a través de un nuevo informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés).
Según la investigación, el calentamiento global está a punto de convertirse en algo fuera de control, ya que los niveles de gases de efecto invernadero en la atmósfera son lo suficientemente altos como para garantizar la alteración del clima durante décadas. Por ello, la ONU instó a tomar medidas urgentes en la materia antes de que sea demasiado tarde.
El estudio de IPCC, que está analizando este fenómeno desde 1988, estuvo basado en más de 14.000 investigaciones científicas. En total, ya presentó cinco informes de evaluación (el último en 2013-2014) y ayer inició la publicación de su sexto número, el cual estará dividido en tres capítulos.
El primero fue publicado ayer y se centra en los elementos científicos más recientes sobre el cambio climático. La segunda parte, que será publicada en febrero de 2022, abarca las consecuencias del calentamiento global y las medidas de adaptación, mientras que la tercera, que será revelada en marzo, difundirá medidas para atenuar el problema.
Entre muchas de las cosas que reveló este primer capítulo, se destacan los diferentes escenarios hipotéticos en los que se advierten que, para 2030, la temperatura media del planeta podría ser 1,6°C mayor a la de los niveles de la era preindustrial. Además, existe la posibilidad de que supere los 2°C para fines de este siglo.
Sin embargo, no todo está perdido. En el caso de que se hagan todos los esfuerzos posibles para combatir el problema, la temperatura global, tras haber crecido 1,5°C, será 1,4°C mayor a la de la era preindustrial en 2100.
Por otra parte, el estudio explicó que, desde 1960, los bosques, suelos y océanos han absorbido el 56% de todas las emisiones de dióxido de carbono. Sin esta ayuda de la propia tierra, la situación actual sería mucho peor.
En las últimas semanas, diversos desastres naturales han golpeado al mundo, como las inundaciones en Alemania y China, o los incendios en Grecia. Respecto a estos sucesos, el IPCC remarcó, a través de la “ciencia de la atribución”, que la humanidad es totalmente responsable de provocar estos fenómenos meteorológicos extremos.
En esta línea, el nivel global de los océanos aumentó unos 20 centímetros desde 1900, principalmente como consecuencia de las capas de hielo que se derriten en la Antártida y en Groenlandia. Si las temperaturas globales aumentan 2°C, el nivel de los océanos subirá cerca de medio metro en el Siglo XXI y continuará aumentando hasta casi dos metros para 2300.
Más allá de las emisiones de dióxido de carbono, el IPCC también se ocupó de remarcar que el metano es otro de los grandes problemas de la Tierra. Este es el segundo gas de efecto invernadero más importante y, aunque permanece menos tiempo en la atmósfera que el dióxido de carbono, tiene un poder de calentamiento mucho más importante.
LOS DATOS CLAVES
-“Desde hace décadas es evidente que el clima de la Tierra está cambiando, y el papel de la influencia humana en el sistema climático es indiscutible”, dijo Valérie Masson-Delmotte
-“El informe es un código rojo para la humanidad. Las señales de alarma son ensordecedoras y las pruebas son irrefutables”, dijo la ONU
-A menos que las emisiones de gases de efecto invernadero se reduzcan de manera inmediata, rápida y a gran escala, limitar el calentamiento a cerca de 1,5ºC o incluso 2ºC será un objetivo inalcanzable
-Entre las consecuencias del cambio climático figura la “intensificación del ciclo de del agua” (lluvias más intensas, inundaciones y sequías más pertinaces): “Las inundaciones del siglo serán las inundaciones del año”, dijo el documento
