La odisea de Julian Assange, fundador de WikiLeaks, está por llegar a su fin: tras 14 años de problemas judiciales, será puesto en libertad luego de declararse culpable de violar la ley de espionaje de Estados Unidos.
Assange, de 52 años, aceptó declararse culpable de un solo cargo penal de conspiración para obtener y divulgar documentos clasificados de defensa nacional de Estados Unidos.
Así, quedará libre tras pasar más de 5 años en una cárcel británica de alta seguridad, a lo que se suman 7 más como refugiado en la Embajada ecuatoriana en Londres mientras luchaba contra acusaciones de delitos sexuales en Suecia y la extradición a Estados Unidos.
WikiLeaks saltó a la fama en 2010 después de publicar cientos de miles de documentos militares estadounidenses clasificados sobre las guerras en Afganistán e Irak.
Entre los más de 700.000 documentos, había un video de 2007 de un helicóptero Apache estadounidense disparando contra presuntos insurgentes en Irak, lo que ocasionó la muerte de una docena de personas, incluidos dos miembros del personal de noticias de Reuters.
Pero lo más grave es que la mayoría de los documentos eran informes militares secretos de Estados Unidos. Esta fue la mayor filtración de este tipo en la historia militar del país norteamericano.
Assange será sentenciado a 62 meses de tiempo ya cumplido en una audiencia en Saipán, en las Islas Marianas del Norte.
El territorio estadounidense en el Pacífico fue elegido debido a la oposición de Assange a viajar al territorio continental de Estados Unidos y por su proximidad a Australia, país al que retornará tras la finalización del proceso.
