Mientras la guerra en Ucrania continúa, uno de los grandes temores es que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, utilice armas nucleares si el conflicto se vuelve demasiado adverso para Moscú.
Por ello, una de las grandes discusiones de la actualidad es en torno al desarme nuclear tanto de este país como de los otros ocho poseedores de este tipo de armamentos.
Actualmente, además de Rusia, también Estados Unidos, Reino Unido, Francia, China, India, Pakistán, Corea del Norte e Israel son los nueve países con armas nucleares, aunque, del total de más de 12.000 que existen en el mundo, unas 10.000 corresponden a Washington y Moscú.
Es por ello que, cuando se intenta presionar a China para que firme algún acuerdo de este tipo, desde Pekín argumentan que primero EE. UU. debería reducir drásticamente sus armamentos.
A esto se refirió el martes el canciller alemán, Olaf Scholz, que pidió nuevas negociaciones internacionales sobre desarme nuclear, diciendo que no solo Rusia y Estados Unidos sino también China deberían participar.
"Sería muy importante empezar de nuevo en materia de control de armas", dijo, añadiendo que varios otros países ya habían acumulado un arsenal nuclear.
Scholz consideró que las armas nucleares representan una amenaza existencial para la humanidad, por lo que existe una "obligación inmediata" de hacer todo lo posible para garantizar que nunca se utilicen.
Además, concluyó que impedir que Irán produzca uranio que podría contribuir a la producción de armas nucleares "sigue siendo una tarea importante".
Según el Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo (SIPRI), el número de armas nucleares operativas aumentó ligeramente en 2022, a medida que los países implementaron planes a largo plazo de modernización y expansión de las fuerzas.
