Dentro de la herencia económica que dejará el gobierno de Alberto Fernández está un Banco Central completamente vaciado. El Frente de Todos (ahora Unión por la Patria) muy posiblemente le entregará a un próximo Gobierno una situación asfixiante en cuanto a la escasez de divisas. Al momento de asumir Alberto y Cristina Kirchner en 2019, recibieron un BCRA con reservas netas de US$ 13.000 millones (según PxQ de Emmanuel Alvarez Agis). Y dejarán, según dice la consultora 1816, que es la predilecta de la City, reservas netas negativas de entre US$ 12.150 a US$ 15.550 millones.
Argentina pagó finalmente al FMI US$ 2.700 millones y las reservas netas cayeron hasta "negativo US$ 5.200 millones", considerando que rondaban actualmente US$ 2.500 millones en rojo.
"Es clave que los nuevos DEGs del organismo lleguen en algún momento de julio (eso requeriría llegar a un acuerdo técnico con el staff antes de mediados de julio), dado que el país enfrenta vencimientos con bonistas privados por US$ 750 millones y pagos al Fondo por US$ 2.650 millones antes de fin de mes (los múltiples vencimientos de julio se pueden volver a agrupar y cancelar a fin de julio)", indicó 1816.
Y dice que en caso de tener que hacer frente a esos pagos con recursos propios, las reservas netas se irían a la zona de "menos US$ 8.600 millones de julio", sin tener en cuenta las ventas que haga el BCRA en el mercado de cambios.
Ahora, luego del pago, Economía avisó que la semana que viene viajará una comitiva para seguir acercando posiciones y cerrar el acuerdo. Irán a Washington los funcionarios Leonardo Madcur y Gabriel Rubinstein.
Massa, que siempre dijo que sólo viajaría para cerrar el acuerdo, esta vez no lo hará.
Léase, aún no está cerrado el entendimiento con el organismo.
De todas formas, que salga o no el acuerdo no modifica el descenso de las reservas del BCRA. La consultora 1816 señala que "suponiendo que el FMI hará sus desembolsos originales de US$ 10.700 millones en lo que queda del año (contra vencimientos julio-diciembre de US$ 8.700 millones), si se respeta la estacionalidad histórica de MULC/CCL las reservas netas se irían para fin de año a entre -US$12.100 millones y -US$ 15.500 millones".
"Aún asumiendo que más temprano o más tarde Argentina arreglará con el Fondo y el organismo cubrirá con desembolsos casi todos los vencimientos de junio-diciembre, creemos que las reservas netas de todos modos se irán a mínimos históricos para diciembre dada la evolución de la balanza de pagos en el primer semestre, la estacionalidad típica en los flujos de divisas, la poca soja que queda por vender de la cosecha actual y la decisión del Gobierno de no devaluar", explica la consultora de los ex Banco Mariva, Adrián Rozanski y Mariano Skladnik.
La pérdida de divisas es un constante para el Gobierno de Fernández. El BCRA vendió US$ 4.100 millones entre el MULC y el CCL en el primer semestre de 2023, que debería haber sido la parte "fácil" del año (US$ 2.800 millones en el MULC y US$ 1.300 millones en el CCL según 1816).
Y afirman que en el periodo 2011-2022 el saldo del Central en el mercado de cambios en el segundo semestre fue en promedio US$ 4.100 millones peor que en el primer semestre, cifra que se eleva a US$ 5.900 millones promedio en los años de cepo y a US$ 7.500 millones en los años de elecciones.
"Hubo solo 2 años en los que el segundo semestre fue mejor para el BCRA que el primero: el 2018, por la corrida que sufrió el peso en el segundo trimestre por la crisis de las Lebac; y el 2022 por el efecto del dólar soja de septiembre y diciembre", recuerdan.
¿Podría haber otro dólar soja? Según datos oficiales, los productores agrícolas ya vendieron el 51% de la cosecha de soja de 2023 versus 42% a esta altura del año pasado y quedan por comercializar apenas 10,3 millones de toneladas, que son US$ 5.200 millones.
Para comparar, hace 1 año quedaban US$16.000 millones a esta altura del año. "Para mejorar sustancialmente la cuenta corriente del segundo semestre será necesario desincentivar importaciones", advierte la consultora.
