En el equipo económico respiraron aliviados con la tregua que hubo en el mercado financiero luego de una corrida que tuvo como último detonante la fallida conferencia de prensa del viernes pasado.
"Hasta acá llegó el dólar. Se fueron de mambo y a $1.400 aparecieron vendedores. Debería estabilizarse e incluso ir un poco más abajo en los próximos días. Hubo una sobrerreacción que no tenía razón de ser", deslizan en pasillos oficiales.
La caída de los dólares financieros, principalmente, se dio con un clima de mercados más benévolo para los mercados emergentes. El MEP y el CCL cerraron este miércoles con caídas del 3,5% y 2,5% respectivamente perforando la barrera de los $1.400. El dólar de la calle, o sea el blue, fue el que menos ajustó y quedó todavía arriba de ese umbral ($1.405 con una merma del 1,4%).
En el Gobierno aún no se hacen cargo de que la conferencia del viernes fue una mala estrategia. "Se comunicó lo que había que comunicar. Fue una buena medida para el mercado pero esperaban otra cosa que nosotros ya dijimos que no iba a ser ahora. Tuvieron expectativas ajenas a la realidad", acotan fuentes oficiales.
Lo cierto es que el movimiento del dólar y los bonos (el riesgo país bajó menos del 1% y sigue firme arriba de los 1.500 puntos) fue un llamado de atención para el Gobierno. El mismo José Luis Espert le advirtió a Javier Milei que había que darle importancia a lo que estaba tratando de decir el mercado.
"Al mercado no le gustó que no hubiera certeza de cuándo se termina el cepo. Pero le quiero decir al mercado que el cepo se va a terminar, ojalá suceda antes de fin de año. No voy a putear al mercado por dos semanas que juega en contra", había dicho Espert.
Algunas luces de cuándo el Gobierno podría estar dispuesto a quitar el cepo pueden verse en el Presupuesto que envió prematuramente Luis Caputo. El Gobierno puntualizó que a finales de este año se quitaría el Impuesto PAIS. "Entre agosto y septiembre se baja un 10% el Impuesto País. Y a fin de año no va a quedar ni una ceniza. Es el inicio del fin de un cepo cavernícola que distorsiona la economía y bloquea el crecimiento", publicó en X el subsecretario de prensa, Javier Lanari.
Sea como fuere, que la suba de los dólares se haya frenado no necesariamente significa que el mercado le haya levantado el pulgar al Gobierno. En Wall Street mantienen el view de que el crawling del 2% es inconsistente y que el esquema cambiario a futuro es un incógnita que no se develó.
"Yo creo que el mercado dijo basta. Con la última baja de tasa, dijo basta y con el tema de las inconsistencias, el mercado dice 'necesito que esto empiece a cerrar'. Porque si esto no logra tener consistencia, no logra poder sostenerse en el tiempo, se cae todo. Entonces, creo que ahí el mercado dijo basta. Y por eso los bonos hace rato que tocaron techo", dijo el analisto financiero Christian Buteler.
"Yo creo que el mercado del dólar va a tener serruchos, esto no quiere decir que todos los días va a subir el dólar. No es que estés en una corrida, pero la tendencia claramente es al alza, por más que te baje un poco. Yo creo que si no cambias el programa, si no mostras esa solvencia que el mercado quiere...creo que el mercado el apoyo ya lo mostró en los primeros meses y ahora quiere empezar a ver los resultados concretos y sostenibles", afirmó.
