Los cortes de luz que se dieron en los últimos días del 2021 y que se prolongaron hasta el 2022 podrían repetirse estas semanas nuevamente.
Frente a las altas temperaturas pronosticadas -incluso mayores a 40 en algunas zonas que serán las más calurosas del planeta- el Gobierno salió de urgencia a importar 150.000 m3 de gasoil para reforzar su oferta de combustibles líquidos en las centrales eléctricas.
La medida se tomó el viernes y el gasoil llegaría al país en 10 días. Con ello, buscan evitar no solo los cortes sino, también, caer en las restricciones al consumo eléctrico de grandes industrias, que se daban entre el 2013 y el 2015, durante el Gobierno de Crsitina Kirchner.
La licitación del gas líquido se llevó a cabo por el Mercado Eléctrico Mayorista (MEM) y resultó clave ya que Argentina se enfrenta a una serie de problemas que limitan su oferta de gas natural: en primer lugar, la ausencia de capacidad de transporte desde Neuquén, ya que los gasoductos están saturados; en segundo lugar, las bajas en la producción de las cuencas Austral y Noroeste y, tercero, Bolivia tiene dificultades en el envío de gas al país, por lo que se recibe una cantidad menor.
Estos días las temperaturas pasarán los 40 grados en Santa Fe, Córdoba y Buenos Aires y, por tanto, se espera que los sistemas de generación operen al límite, con demandas récord que podrían superar los 27.019 MW. Esta cifra fue la más alta registrada, el pasado 29 de diciembre.
¿Cuánto costó toda la compra?
La licitación se dio en tiempo récord. Además, Cammesa suele adquirir los combustibles con un rango de 45-60 días de margen y nunca lo hace en enero. Por todas estas razones, según especialistas y directivos de empresas consultados por el portal EconoJournal, “es difícil que el Gobierno pueda conseguir todo el gasoil que salió a buscar en el mercado” a la vez que advirtieron que “casi con seguridad, el precio adjudicado será más caro que la media que viene pagando Cammesa”.
En esta oportunidad, se estima que, la cantidad de participantes son 3 traders: Trafigura, Vitol y Glencore. Las tres disponen de capacidad de almacenaje instalada en el país y, generalmente, transportan derivados de combustibles a países vecinos como Paraguay y Bolivia, por lo que tienen mayor margen de maniobra en el plano comercial para redireccionar el producto hacia Cammesa.
Desde petroleras consultadas por EconoJournal comentaron al respecto que “lo estándar es importar cargamentos de 50.000 m3. Pero como no hay tiempo para garantizar ofertas por ese volumen de gasoil, Cammesa bajó el umbral para que barcos con 10.000 o 15.000 m3 de gasoil puedan participar”. Y remarcaron que “aún así, es difícil que pueda conseguir los 150.000 m3 que busca”.
Enero no es el momento ideal
Una de las cuestiones a considerar con esta compra es que Cammesa no suele importar combustibles durante enero. Esto se debe a que la Ley de Presupuesto contempla un artículo donde se autoriza a la compañía eléctrica a comprar gasoil en el exterior sin tener que pagar el Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) que le correspondería. Sin embargo, para poder acceder a ello se precisa tiempo para la validación conjunta del Ministerio de Economía, la AFIP y la Aduana. Por tanto, conseguir que los tres organismos firmen el expediente lleva, como poco, unas semanas.
Así, en esta oportunidad, Cammesa no cuenta con el aval para desgravar impositivamente la compra del gasoil. Sumado, cabe remarcar que el Gobierno aún no obtuvo aprobación del Presupuesto 2022 en el Congreso, por lo que aún persiste el del 2021.
Este impuesto representa cerca del 30% del precio. Por eso, impactará de manera directa en los subsidios que Cammesa tiene para operar. Cada cargamento de 50.000 m3 ronda los US$ 30 millones y, la falta de desgravación del ICL será de cerca de US$ 30 millones más de los previstos -si se adjudican los 150.000 m3 licitados-. No obstante, se puede gestionar el recupero retroactivo del impuesto, lo que hizo Cammesa en 2019.
Cada vez más
En septiembre del 2021, en las proyecciones de gas para 2022, desde Cammesa se estimó un requerimiento de 600.000 m3. Sin embargo, frente al encarecimiento del precio del LNG, la sequía que se mantiene en la cuenca del Paraná-Uruguay, el bajo nivel de reservas hídricas en el Comahue y los problemas para traer gas desde Bolivia, junto al descenso de producción de gas en la cuenca Austral, las proyecciones, hoy, son mucho mayores, casi triplicando la cifra inicial.
Por lo pronto, el Estado compró, el viernes, otros seis cargamentos de gasoil por un total de 300.000 m3, tal como informó EconoJournal en diciembre. De ellos, Trafigura se quedó con tres barcos de 50.000 m3; Vitol con otros dos y el restante fue para Shell. Para febrero también se licitó la compra de 200.000 m3 de fuel oil.
Los cortes ahora
Luego de un pico que tuvo lugar en la tarde del lunes, al momento, la cantidad de afectados por falta de suministro eléctrico -según el ENRE- son 3880 (por parte de Edesur) y 2290 (por parte de Edenor).
