Hay consenso entre los economistas. Julio fue un buen mes para la actividad económica.
Así lo resumen en Econviews: "Los datos de actividad en julio nos dan motivos para alegrarnos. Pero hay que recordar que ni junio fue tan catastrófico, ni julio mejoró de manera tan fantástica. Si observamos los indicadores adelantados de actividad la sensación es que en junio todos los sectores sufrieron caídas significativas, seguidas de un fuerte repunte en julio. Creemos que la realidad es un poco más matizada: la tendencia es más suave de lo que parece a primera vista, los feriados de junio distorsionaron las cifras y eso es un efecto que el Indec tendrá en cuenta en sus números finales".
Hecha esa aclaración, repasan los principales indicadores que se conocen hasta el momento sobre la actividad del mes de julio.
"Por lo pronto, los datos de julio son todos positivos", dicen y enumeran:
- El crédito al sector privado viene creciendo por tercer mes consecutivo (+9,6% m/m).
- La perspectiva del comercio es optimista con la confianza del consumidor (+5,2%), ventas minoristas (+8,7%), ventas mayoristas de autos (+31,7%) y patentamientos de motos (+12,6%).
- La producción de autos mejoró (+37,9%).
- Los indicadores de construcción vienen para arriba y la faena vacuna subió 23,9% intermensual.
Un sector importante se dio vuelta (aunque sigue muy deprimido)
Los indicadores de construcción vienen para arriba. "La construcción está mostrando señales claras de recuperación", dicen y recuerdan que, a lo largo de 2024, la actividad constructora se redujo 32,7%. "Aparecen algunas razones para el optimismo por más que en términos interanuales sigue muy deprimida", dicen.
En junio, la actividad en el sector creció 2,7% mensual, tercer mes consecutivo de recuperación. Y tanto los indicadores adelantados como las expectativas de los empresarios sugieren que la construcción está saliendo del pozo recesivo.
¿Cómo viene la obra pública?
Hubo un incremento mensual en el consumo de asfalto, un indicio de que se está descongelando. También hay expectativa alrededor del plan de reactivación de la obra pública que presentó Guillermo Francos destinado, en principio, a las provincias que acompañaron la sanción de la Ley Bases.
¿Cómo viene la obra privada?
En junio aumentó el consumo de ladrillos huecos, pero cayó el de cemento portland, así que no hay una señal clara de reactivación en la obra privada. Lo que sí sabemos es que Jorge Macri pausó la autorización de nuevas construcciones por 180 días, algo que generó quejas en el sector.
"Julio promete ser otro mes de recuperación para el sector de la construcción. Así lo marcan los despachos de cemento con un incremento mensual del 20%, y el Indice Construya con 13%", dice Econviews y pone como drivers la gradual estabilización macro y la reaparición del crédito para el sector privado, incluido el hipotecario, "que están comenzando a impactar positivamente en la dinámica del sector".
La industria se quedó en el andén
Sin embargo, hay un sector muy importante de la economía argentina que todavía "no la ve". Es la industria.
"El sector industrial sigue para atrás, y no hay indicios de recuperación. La industria cayó 1,6% mensual en junio. La variación interanual fue de - 20,1%, y acumula una caída del 16,1% en lo que va del 2024", dijeron desde Econviews en base a los datos del Indec.
Comparado a 2023, todos los rubros se contrajeron.
Las variaciones más drásticas se ven en la producción de televisores, aparatos de informática, instrumentos médicos y otros aparatos electrónicos, también en la producción de muebles, productos de tabaco y el rubro "productos minerales no metálicos" que incluye la producción de cemento, vidrio, cal y yeso. Sin embargo, estos rubros no son los de mayor incidencia.
Los sectores más críticos para la economía son "industrias metálicas básicas", "alimentos y bebidas" y "maquinaria y equipo".
Industrias metálicas básicas
Dentro de las industrias metálicas básicas, la industria siderúrgica tiene el mayor peso. La caída de la industria siderúrgica ya empezó en junio del año pasado y se agravó en diciembre con una caída del 20,3% m/m.
La Cámara Argentina del Acero explica que la producción en junio estuvo especialmente afectada por la suspensión temporal de plantas. Acindar paralizó su producción en dos oportunidades en lo que va del año, por la baja demanda. La última suspensión inició el 24 de junio, y duró hasta mediados de julio.
Por lo pronto en el sector no se siente una recuperación en la demanda de acero, salvo por el segmento energía. Hay muchos sectores industriales que hoy están en la disyuntiva entre producir e importar.
Alimentos y bebidas
La producción de alimentos y bebidas es uno de los pocos rubros industriales en los cuales la caída no es pronunciada. Mientras que el rubro en general mantuvo una tendencia prácticamente constante desde 2016 en adelante, algunas categorías relevantes como molienda de oleaginosas tuvieron un desempeño menor a la media, y otras como carne vacuna fueron superiores.
La producción de alimentos y bebidas viene en declive desde abril de 2024, inicialmente explicado por la sequía. Recién en los últimos dos meses se revirtió la tendencia, con incrementos mensuales significativos del +2,9% y +2,4%.
"Proyectamos una variación del producto de -3,6% y -6% para el PIB sin agro", dice Econviews
Aunque alimentos y bebidas en su conjunto viene mejorando, no es algo que se vea reflejado en todos los rubros. La producción de carne vacuna no logra compensar la caída sufrida en agosto de 2023 (-9% m/m), y oscila en los mismos niveles. La tendencia del vino es a la baja desde 2021, y en el último mes varió -17,2%.
La molienda de cereales se mantiene estable, mientras que la de oleaginosas viene repuntando significativamente desde octubre. Gaseosas, aguas, cervezas y otras también muestra una importante recuperación los últimos meses (+18,1% en junio).
Maquinaria y equipo
La maquinaria agropecuaria tiene el mayor peso en este rubro. En diciembre, la maquinaria (que ya venía mal) cayó 17,8%, y la agraria en particular anotó -33,7%. Electrodomésticos, otra categoría con peso, redujo su producción 13,9% mensual en diciembre y 22,1% en enero. Desde entonces, no se ven incrementos muy significativos.
El PIB (sin agro) puede caer 6%
En 2024, la caída del PIB no va a ser tan fuerte gracias al agro, que representa alrededor del 8% del total, pero ayuda a muchos otros sectores de manera indirecta.
"Proyectamos una variación del producto de -3,6% y -6% para el PIB sin agro. Que la industria no logre despegar es un motivo de preocupación, considerando que aporta 19% del valor agregado. La construcción, aunque tiene un notable efecto multiplicador en el empleo, solo contribuye con 3% al producto, por lo que su impacto es limitado. La compensación podría venir del sector comercio, que constituye 12,4%. A pesar de haber comenzado el año muy golpeado, es esperable que se recupere lentamente junto con la mejora de los salarios reales", dijeron desde Econviews.
No basta con un solo mes para concluir que la economía retomó la senda del crecimiento
Los datos de alta frecuencia de julio dan cuenta de una incipiente recuperación en la mayoría de los sectores.
En primer lugar, los indicadores que tuvieron un mayor crecimiento intermensual:
- Patentamiento y producción de autos (38,8% y 38,7%, respectivamente).
- Liquidación de divisas (32,3%).
- Despachos de cemento (25,9%).
- Patentamiento de motos (21,3%).
- Además, el nivel de actividad de las empresas más representativas del mercado de la construcción (Índice Construya) también mostro un valor muy positivo, con un crecimiento del 12,1% m/m s.e.
En segunda instancia, la recaudación tributaria nacional vinculada a la actividad aumentó 10,3% mensual real, impulsada fuertemente por la suba de las contribuciones patronales (+37,5% m/m).
Finalmente, los créditos al sector privado también evidenciaron una clara recuperación, creciendo 13,1% frente a junio 2024.
De todas formas, adverte Invecq, "cabe destacar que dichos indicadores aún se encuentran -en promedio- 5% por debajo del mismo mes de 2023; de hecho, solo dos de los nueve crecieron en términos anuales (y uno de ellos -liquidación de divisas- se explica por la sequía del año pasado)".
En resumen, Invecq dice que "los primeros datos de julio muestran signos de recuperación en la mayoría de los sectores", pero, matiza, "no basta con un solo mes como para concluir que la economía retomó la senda del crecimiento".
"Habrá que monitorear cómo sigue la actividad en los próximos meses y, en particular, si habrá una recalibración en el esquema cambiario, que tendría un claro impacto en la economía real. Por lo pronto, el gobierno confía en que uno de los motores de la recuperación sea el crédito privado, que viene creciendo de manera ininterrumpida desde abril", concluyen.
