El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, indicó ayer que el conjunto de medidas de apoyo del Estado a la población y a las empresas en el marco de la crisis desatada tras la pandemia de coronavirus, incluyendo el gasto público y el crédito al sector productivo, ascendió al 5,25% del Producto Interno Bruto (PIB). Esta proporción equivale a más de $ 1,43 billones.
Según estimó el ministro, en este contexto cerca de 41 millones de personas (el 91% de la población nacional) se benefician de algún ingreso por parte del Estado. Se trata de unos 22 millones de adultos que reciben algún tipo de aporte o ayuda del Estado y que viven con otras 19 millones de personas.
Ese universo incluye a 9 millones que reciben el IFE (Ingreso Familiar de Emergencia), de los cuales 2,4 millones están ligado a la Asignación Universal por Hijo (AUH) y 1,5 millón a la tarjeta Alimentar; 7 millones de jubilados y pensionados; 3,2 millones de empleados públicos; y 2,6 millones de asalariados privados que recibieron al menos un pago del programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP).
Por otra parte, el ministro aseguró que hay signos de recuperación luego de la abrupta caída de la actividad tras la implementación de la cuarentena. En ese sentido, Kulfas remarcó que el empleo privado habilitado para trabajar volvió a subir y alcanzó el 89% del total durante los primeros días de agosto. También resaltó un aumento mensual de 19,6% en el consumo durante julio en la zona del AMBA mediante el programa Ahora 12 y un repunte en la actividad industrial.
