El ministro de Trabajo, Claudio Moroni, afirmó hoy que es "timídamente optimista" sobre la reactivación del empleo en algunos sectores. En diálogo con Radio 10, dijo que las negociaciones paritarias "se están desarrollando razonablemente bien, sin un nivel de conflictividad importante" y anunció que entre marzo y abril convocará al Consejo del Salario.
El ministro sostuvo que "es razonable que el primer consumo que reacciona es el de alimentos" y señaló que espera que "en marzo, abril, el resto de las actividades empiecen a repuntar en cuanto terminemos el proceso de normalización".
Explicó que en el indicador que mide la intención de las empresas "vemos, por una leve diferencia, que hay mayor cantidad que quieren tomar gente en vez de despedir". “Ha parado la locura que vimos el año pasado”, consideró Moroni.
Sin embargo, expresó: "No queremos ser falsamente optimistas, estamos en una situación muy compleja. Tenemos que ir trabajando de a poco. Vemos con cierto optimismo determinados rubros pero no queremos caer en el facilismo de anunciar cosas que después no suceden".
Al ser consultado sobre las paritarias, el ministro dijo que "se están desarrollando razonablemente bien" y agregó: "Lo que vamos viendo es que razonablemente van recomponiendo los salarios respecto de la pérdida que sufrieron el año pasado y no vemos un nivel de conflictividad importante".
"Somos tímidamente optimistas", aseveró el ministro, al ser consultado sobre la reactivación del empleo.
Moroni reiteró que no se prorrogará la doble indemnización a partir de junio, cuando terminan los 6 meses de esa medida excepcional tomada por el gobierno de Alberto Fernández. "Hoy no vemos elementos como para decidir que tenemos que mantener más allá de ese plazo una medida excepcional", dijo el funcionario.
Por otro lado, el titular de la cartera de Trabajo anunció que "en marzo o abril" se estará convocando al Consejo del Salario para fijar un nuevo salario mínimo, vital y móvil, ya que están "terminando de armar las comisiones".
En ese sentido, expresó que "el salario mínimo hoy cumple una función de fijar algunos parámetros de la seguridad social, más que ser realmente un indicador del salario, ya que ha quedado tan retrasado que no cumple ese papel".
