por Mariano Cúparo Ortiz
El informe mensual correspondiente a septiembre de la consultora Labour, Capital & Growth (LCG), que fundara el actual embajador en Estados Unidos, Martín Lousteau, hizo un análisis crítico de la recesión que vive la economía local y de la falta de un plan macro consistente, aunque también refirió a lo que parece ser una desaceleración en la caída. “La magnitud de la recesión es mayor y la recuperación más lenta que la esperada pero se ven menores tasas negativas”, afirma el informe.
Será lento Respecto a la mayor magnitud de la caída, sostiene: “En julio la economía tuvo una caída de 5,9% anual, la mayor desde la crisis del 2009 y sumó cuatro meses consecutivos de baja mensual desestacionalizada. Acumula una caída de 4,5% desde el máximo alcanzado en junio de 2015. Otro dato que refleja la magnitud de la recesión es que todos los componentes de la demanda cayeron en el segundo trimestre, algo que no se observaba desde la crisis del 2001”.
Y acerca de la lentitud mayor a la esperada para alcanzar la recuperación: “En 2014 la economía tardó siete meses para volver a crecer (trece meses para alcanzar nivel previo) y en la actualidad se acumulan 13 meses sin crecimiento”.
La mejora parcial en los indicadores de actividad, sostiene LCG, aparecerían de la mano de la movilidad de las prestaciones otorgadas por la Anses en septiembre y los incrementos salariales de segunda y tercera ronda, en el marco de una inflación desacelerando, además de la reactivación de la obra pública junto al presunto piso que estaría tocando Brasil en su desempeño.
El rebote
El presunto freno a la caída ya habría comenzado a verse en agosto, con indicadores que mostraron mejoras. “En agosto los patentamientos de 0 km se incrementaron 21% interanual, mientras que el descenso en la producción automotriz continuó desacelerando (-8,5% interanual en agosto vs. 17% en el bimestre anterior). Luego de cinco meses consecutivos en baja, los patentamientos de motos crecieron 13% interanual. Por último, los despachos de cemento aumentaron 7% interanual en agosto luego de 7 meses consecutivos en baja”, detalla el informe.
Además, explica, “las ventas minoristas relevadas por CAME mostraron una desaceleración en la caída en casi todos los sectores, en tanto que las ventas en supermercados y shoppings mostraron una dinámica similar en julio”, aunque “el consumo en los supermercados estará más golpeado que en los shoppings reflejando que el impacto de la recesión y los tiempos de la recuperación será más lento para los sectores de menores ingresos”.
Inconsistencias
Aun así, el informe de LCG fue muy crítico con las consecuencias que las contradicciones del Gobierno pueden tener respecto a esta recuperación. “En el día en el que se publicó el dato de actividad económica de julio, que reflejó la mayor caída en siete años, el BCRA mantuvo inalterada la tasa. Aquí es cuando observamos la ausencia de un plan macro consistente que defina las prioridades”.
