Esta tarde el presidente de la Coordinadora de las Industrias de los Productos Alimenticios (COPAL), Daniel Funes de Rioja, y otras autoridades de la entidad, se reunieron con Eduardo Hecker, presidente del Banco Nación, acompañado por el Gerente General, José Fragati y parte del equipo.
El objetivo del encuentro fue poner de manifiesto las principales necesidades de financiamiento del sector, así como también acercar algunas propuestas para trabajar de manera conjunta y lograr una mayor asistencia crediticia.
“En un contexto de inestabilidad económica como el que venimos padeciendo hace años, sumado a esta situación anómala donde algunas empresas están trabajando al 20 y 30% de su capacidad instalada, requerimos de manera urgente financiamiento para lograr mantener su estructura de pie.”, manifestó Funes de Rioja.
Si bien el banco posee distintas herramientas de financiamiento para afrontar la crisis actual, la Coordinadora explicó que existen muchas empresas de la Industria de la alimentación y bebidas que no han podido acceder a las mismas por la falta de adecuación de los requisitos a las actuales calificaciones crediticias o por la falta de instrumentos adecuados a sus necesidades.
En ese sentido, se indicó que no sólo resulta necesaria una importante asistencia crediticia para la urgencia actual, sino también la necesidad de abordar e ir construyendo un andamiaje crediticio sólido para afrontar las necesidades que demandarán la apertura controlada de la economía, el aumento de la capacidad instalada que impactará en el próximo semestre y para afrontar la futura crisis de consumo.
Ello llevó al abordaje de los principales destinos crediticios, entre ellos, la refinanciación de pasivos para que permitan a las empresas salir del estancamiento y lograr reinsertarse en el sistema productivo, el capital de trabajo para poder aumentar su producción y la utilización de su capacidad instalada.
El financiamiento también serviría para apuntalar la compra pública mediante el descuento de las facturas por las licitaciones al Estado, la inversión productiva para la asistencia de proyectos con tasas y plazos adecuados para la compra de bienes de capital, la articulación de cadenas de valor mediante la asistencia de clientes y proveedores de grandes empresas y, finalmente,para la prefinanciación de exportaciones de empresas en marcha y para las empresas que realicen su primera exportación.
Durante el encuentro se solicitó trabajar de manera articulada. En el marco de un diálogo constructivo, se acordó el compromiso de avanzar en la construcción de propuestas de manera conjunta.
