El Observatorio de Datos Económicos y Sociales de la CGT publicó ayer su medición de la inflación de junio, que mostró un incremento de precios bastante por encima de lo que espera el mercado para ese mes: 1,8%. Las consultoras privadas vienen previendo una variación de entre 1,2% y 1,5%, lo que es de por sí bastante alto para las metas que se propuso cumplir el BCRA este año (12-17%).
De esa forma, para el Observatorio de la CGT la inflación interanual quedó en de 28,37%, un número bastante más alto del que precisaría el BCRA que se registre en el IPC GBA de junio para encaminarse al cumplimiento de las tan mentadas metas. De hecho el presidente de la autoridad monetaria, Federico Sturzenegger, viene sosteniendo repetidamente que espera una de 21-22% para julio. Y julio promete ser no tan amigable, tal como señalan muchos analistas, llevando por la depreciación del tipo de cambio, de los aumentos de 6% en las prepagas, la suba de las expensas por el acuerdo paritario de los encargados de edificios y el incremento en los combustibles, más alguna estacionalidad típica en turismo y esparcimiento.
Además la CGT publicó las canastas básicas alimentaria y total, que mostraron que un adulto para no ser indigente debió tener un ingreso de $ 2.169 en junio. Y de $ 5.016 para no ser pobre. Mientras que una familia formada por dos adultos y dos niños necesito uno de $ 6.768 para no ser indigente y de $ 15.225 para no ser pobre.
