Los datos relevados por el IBIM-OJF (Inversión Bruta Interna Mensual de Orlando Ferreres & Asociados) estimaron para julio una caída de la inversión de 4,6% anual, medido en términos de volumen físico (descontando el efecto precios).
Así, el acumulado de los primeros siete meses del año muestra una contracción de 10,5%. Por su parte, en la medición a precios constantes la inversión representó el 20,0% del PIB, mientras que medido en dólares, en julio se invirtieron US$ 6.945 millones.
En maquinaria y equipos hubo durante julio una contracción de 11,2% al compararse con igual mes del año pasado, como resultado de una caída en las ventas de equipos durables de producción importados de 14%, frente a una merma en los equipos nacionales de 7,5%. De esta manera, el conjunto acumula una retracción de 10,5% al comparar el período enero-julio del corriente con igual período del año anterior.
El segmento de la construcción registró un avance de 2% respecto de julio del año pasado, mostrando un marcado contraste respecto del guarismo de -4,3% anual que exhibiera el mes pasado. De todas maneras, en la medición acumulada para los primeros siete meses del año, el apartado muestra una merma interanual de 2,2%.
Desde Ferreres observaron que en julio la inversión mostró una desaceleración en su ritmo de contracción, continuando con la tendencia exhibida en los últimos meses. El leve impulso vino desde el sector de la construcción, ayudado por la desaceleración en la caída de los equipos durables nacionales.
"De todas maneras, esta tendencia se verá sin dudas interrumpida por los acontecimientos posteriores a las elecciones primarias. Así, la incertidumbre posterior a las PASO generó una reacción muy fuerte en los mercados, derivando en una depreciación de la moneda de 28% en menos de dos semanas. En este contexto, los agentes económicos se están retirando a los activos de menor riesgo posible, a la espera de que se aclare la situación política y económica del país", advirtieron concluyendo el informe.
