Con la implementación de las medidas de aislamiento social durante los últimos once días de marzo, las expectativas para ese mes en cuanto al desempeño de la industria manufacturera eran negativas. Sin embargo, el resultado del tercer mes del año fue mucho peor de lo que se había estimado.
Ayer, el Indec dio a conocer el dato del Índice de Producción Industrial (IPI) correspondiente a marzo, el cual señala que durante el tercer mes del año el sector presentó una caída de 17% respecto al mes previo en la medición desestacionalizada y una baja de 16,8% en comparación con el mismo mes del año pasado.
Con estos datos, marzo registró el tercer mes consecutivo de caída interanual y la actividad de este sector se situó a niveles de principios de 2005. De esta manera, el desempeño del primer trimestre del año acumuló una contracción de 6,4% en relación al mismo período de 2019.
El Indec justificó en su informe que las limitaciones operativas del sector por causa de las medidas del aislamiento social incidieron “de forma parcial en una primera etapa y de forma muy marcada sobre el final” de marzo.
De acuerdo con el organismo estadístico, todos los rubros, de un total de 16, cerraron marzo con datos negativos (en febrero, fueron 11 los rubros que cerraron con bajas). El rubro que presentó menor caída en marzo fue el de alimentos y bebidas, con una baja de 2% respecto al mismo mes de 2019, seguido por sustancias y productos químicos (-4% interanual).
“Esto se debe a que el confinamiento obligatorio llevó a que muchas industrias que no son consideradas como de necesidad básica redujeran su producción o incluso la cesaran”, explicó la consultora LCG en un informe.
Por su parte, el sector automotriz, el cual viene muy afectado desde meses previos, durante el tercer mes del año se ubicó entre los sectores con mayor caída al registrar un desplome del 34,9% respecto al mismo mes del año pasado. Los peores registros se observaron en los rubros de “productos minerales no metálicos” (-40,7% interanual) y “prendas de vestir, cuero y calzado” (-37,9% interanual).
Hacia adelante
Según LCG, el sector industrial, que ya venía con niveles bajos, seguirá cayendo debido a que en este contexto de crisis económica por la pandemia “resulta imposible que el sector remonte”. Dicha caída, afirma, dependerá del tiempo que se tarde en lograr una salida ordenada del confinamiento y un retorno a la actividad, y la forma en que se organice esta salida también determinará cómo se tratará de recuperar al sector. El sector espera que la cuarentena se flexibilice en los próximos días. “En caso contrario, la prolongación del aislamiento social generará costos todavía más altos para estos sectores y la actividad en su conjunto”, advirtió la consultora, a la vez que señaló que el efecto que observado fue la caída de la oferta, la cual costará recuperarse debido a la escasez de demanda.
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La construcción se contrajo 46,8%
La actividad de la construcción profundizó su deterioro en marzo, que acumuló 19 meses en baja interanual, y mostró una caída similar a la de principios de 2002 en términos interanuales. Según el Indec, en marzo el sector presentó una baja mensual desestacionalizada de 32,3%, mientras que en comparación interanual el desplome fue de 46,8%. De esta manera, el primer trimestre del año acumuló una variación negativa de 28,1% interanual. “El deterioro se explica en gran parte por la parálisis del sector debido al confinamiento. Además, se debe sumar el fuerte ajuste real que viene llevando el sector público en los recursos destinados a la construcción (la reducción sólo en asfalto fue del 74%) y se debe considerar que este sector, previo a las medidas de cuarentena, ya se veía afectado por la ausencia de créditos hipotecarios que podrían traccionar la producción”, explicó LCG.
