Franco Colapinto nació el 26 de mayo de 2003 en Pilar, donde también vivo. La ley de promoción de la industria del software fue sancionada apenas un año después, el 18 de agosto de 2004, por el gobierno de Néstor Kirchner, con vigencia de diez años. CFK la prorrogó en 2013, por cinco años más. Bizarrap, de alguna manera, los juntó el año pasado.
Al indudable talento de Franco se sumó la suerte. Conoció a Bizarrap, quien le acercó a Globant, y hace poco a Mercado Libre. Estas empresas y algunas pocas más pondrán los casi US$ 4 M para subirse al Williams de Fórmula 1 por 9 carreras. Histórica escudería en la que corría Carlos Reutemann y que en 1981 le hizo, literalmente, perder el campeonato.
La ley de software, junto con la siembra directa, fueron las dos innovaciones más decisivas de la Argentina de las últimas décadas.
- La siembra directa fue una innovación privada de productores agropecuarios que aumentó notablemente la productividad en la producción de granos (no sólo soja).
- La ley de software de Néstor fue la mejor política pública tecnológica por lejos, de cualquier gobierno. Otorgaba exención del 60% del impuesto a las Ganancias y un bono (exención) del 70% de los aportes patronales, en una actividad intensiva en personal calificado, por diez años. En la práctica aplicaba mayormente a nuevas inversiones y empleo, con lo cual no generó costo fiscal.
La ley de software, junto con la siembra directa, fueron las dos innovaciones más decisivas de la Argentina de las últimas décadas.
De esta ley se consolidaron los unicornios argentinos, Globant, Meli y Despegar, entre otras empresas nacionales, y también la aprovecharon multinacionales como Accenture, EY, entre otras, donde trabajan muchos de mis alumnos de la UCA, gracias a estos beneficios. A esta ley le siguió la Ley de Economía del Conocimiento (Mauricio Macri, 2019), con similares beneficios al software y extensibles a otros sectores de I+D, por otros diez años.
En la vida, las cosas no parecen ser tan blanco o negro; los grises son más frecuentes. Néstor dilapidó los superávit gemelos -¡que error!-, pero Franco estará en la F1 también gracias a Él. Las grietas no sirven, las posturas extremas menos.
La rueda de la vida sigue girando.
¡Suerte Franco!
