Esta semana el Indec dio a conocer una inflación de 11% mensual para marzo. Si bien hubo una rápida desaceleración desde el pico de diciembre (25,5%), la inflación acumulada en los últimos cuatro meses fue 90% y en el mismo período el dólar informal subió solo 6%. Esto indica que hubo un significativo encarecimiento en dólares. De hecho, medios de comunicación y redes reflejan evidencia anecdótica del encarecimiento en indumentaria o comidas.
Sin embargo, el encarecimiento de los últimos meses se produjo partiendo de precios extremadamente bajos medidos al dólar paralelo. Entonces, ¿hoy Argentina está cara en dólares?
Abordaremos esa pregunta en este informe, comparando los precios en Argentina con un grupo de países relevantes (los países seleccionados para la comparación son de Brasil, Chile, México, Colombia, Perú, España, Italia y EE.UU.).
Las conclusiones de este análisis son:
- El análisis de una canasta relevante de bienes y servicios muestra que, al dólar paralelo, Argentina todavía no está cara en dólares.
- Sin embargo, hay un grupo de sectores muy protegidos, como textiles y electrónica, donde Argentina sí está cara en dólares.
- Si miramos la evolución en el tiempo, Argentina está algo más cara que en 2023, pero sustancialmente más barata que en 2017.
- Si hacemos la comparación al tipo de cambio oficial, la canasta de bienes y servicios lógicamente se encarece un poco en dólares, pero sigue estando más barata que en los países con los que comparamos.
Hay que tener en cuenta que, si bien Argentina está más barata en dólares que en los países analizados, los salarios aquí son menores en dólares que en esos países.
Existe una gran heterogeneidad en los precios de la economía argentina cuando los comparamos contra precios de bienes o servicios similares en otros países.
La indumentaria y los bienes durables son más caros que lo que salen en el promedio de países seleccionados, mientras que el resto de los productos analizados (alimentos, servicios, educación, alquiler) son más baratos.
Por ejemplo, un vestido en Argentina sale US$ 62 al paralelo, mientras que en promedio cuesta US$ 39 en los otros países. O un celular que en otros países cuesta unos US$ 1.200, aquí sale US$ 1.990 (Tabla 1).
Tabla 1. Precios de bienes y servicios seleccionados
Argentina vs. promedio de países seleccionados
Los servicios en Argentina están especialmente baratos (Gráfico 1). El precio del boleto de transporte público y de los servicios básicos del hogar (electricidad, gas, agua, etc) representa alrededor de 20% de lo que cuesta en promedio en el resto de los países analizados. La escuela primaria está en un rango similar.
Además, todos esos servicios son más baratos en Argentina que en cualquier otro país entre los analizados. En un rango algo más alto, pero también baratos en términos relativos se encuentran los servicios de Internet y telefonía celular, cuyo costo representa 60% y 70% del promedio del resto de países, respectivamente.
Los alimentos también siguen siendo baratos en Argentina (Gráfico 1). En especial la carne, que cuesta alrededor de la mitad de lo que cuesta en los otros países, en promedio. La leche, el pan, los huevos y las manzanas cuestan entre 60% y 80% con respecto al promedio del resto de países. En casi todos esos casos, Argentina es uno de los países donde más baratos se consiguen esos bienes.
Caso contrario se da con indumentaria y electrónica. La ropa se encuentra en torno a 40% por encima del promedio. Una computadora cuesta cerca de 40% más de lo que cuesta en promedio afuera de Argentina y un celular cuesta alrededor de 70% más.
La comparación con otros períodos también arroja información relevante. En promedio, Argentina parece haberse encarecido en dólares con respecto a 2023 (Gráfico 2). Esto es esperable, ya que en 2023 Argentina estaba excesivamente barata, por un dólar informal que estaba altísimo (ya que priceaba un escenario de crisis con probabilidad relativamente alta).
A pesar de que casi todos los bienes y servicios se volvieron más caros en dólares desde el año pasado hasta ahora, se destaca nuevamente el caso de la indumentaria. En 2023 esta estaba excesivamente cara -producto de medidas proteccionistas-, mientras que hoy se ha abaratado relativamente, acercándose al promedio de otros países (Gráfico 2).
La comparación contra 2017 es todavía más elocuente (Gráfico 2). En ese año, casi todos los bienes y servicios valían más caros en Argentina que en el promedio del resto de los países, con algunas excepciones. Esto es relevante porque, posterior a 2017, en abril de 2018, una de las causas de la crisis fue que Argentina se había vuelto excesivamente cara en dólares y eso la llevaba a tener déficits comerciales significativas. Hoy Argentina está significativamente más barata relativo al resto de los países que en 2017.
Tomando los precios al dólar oficial, en lugar de al paralelo, la conclusión no cambia mucho. La mayor parte de los bienes y servicios están más baratos que en el promedio del resto de los países (Gráfico 3).
La excepción siguen siendo los bienes de indumentaria y electrónica, que están más caros. El hecho de que la mayoría de los bienes y servicios sigan estando baratos medidos al dólar oficial con respecto a otros países indica que el dólar oficial no estaría atrasado hoy.
Por el contrario, se observa que tanto en 2017 como en 2023 (períodos que fueron seguidos por un salto del tipo de cambio oficial) Argentina sí estaba más cara que el promedio en la mayoría de los bienes y servicios.
