Importado desde Japón
Toyota es la marca que lidera la industria local en términos de producción, exportación y ventas, y a la vez una de las que más aportes hace al mercado sumando opciones de productos.
Si bien es fuerte en el segmento de las pick-ups y SUV con Hilux y Corolla Cross, también logró suplir la salida del Etios con el Yaris y se consolida como la preferida del público argentino. Pero lo hace -a su vez- mechando modelos accesibles con otros de nicho, como el caso de la GR 86 que mencionamos hace algunos días (ver acá) y ahora con un lanzamiento muy particular.
La automotriz nipona lanza el Crown, un modelo que lleva un nombre con mucha historia pero que en este caso lo hace para ser el "nuevo vehículo insignia", y con tecnología híbrida.
En un golpe de vista podríamos afirmar que se trata de un sedán del segmento D pero su despeje y el remate posterior, con la caída del techo llegando hasta el portón trasero nos indican que estamos ante un crossover (en este caso la cruza de un SUV y un sedán).
Mide 4.980 mm, 1.840 mm de ancho y 1.555 mm de alto con una distancia entre ejes de 2.850 mm lo que le asegura una gran habitabilidad y un baúl de 433 litros de capacidad.
Más allá de sus líneas que son muy llamativas, con pasarruedas generosos y llantas que calzan neumáticos en medida 225/45 R21, lo distintivo está en su tecnología que es turbo e híbrida (no se enchufa).
Tiene, por un lado, un motor naftero de cuatro cilindros, de 2.4 litros con turbo que entrega una potencia de 272 cv @ 6.000 rpm y un torque de 460 Nm @ 2.000-3.000 rpm, dotado de la ya conocida distribución Dual VVT-i.
Por otro lado suma un sistema híbrido auto-regenerable que permite alcanzar una potencia máxima combinada de 349 cv @ 6.000 rpm. Esto lo logra sumando dos motores eléctricos, uno en cada eje (de 83 cv adelante y de 80 cv atrás).
Si bien no es un vehículo en el que se busquen aspectos deportivos, Toyota indica que acelera de 0 a 100 km/h en 5,8 segundos mientras que la velocidad máxima está limitada a 200 km/h.
Al tratarse de un híbrido y no de un eléctrico cuenta con transmisión, en este caso es automática de seis velocidades, mientras que por la disposición de los impulsores, la tracción es del tipo integral adaptativa e-AWD (All Wheel Drive), con selector de modos de conducción.
Ofrece además dirección con asistencia eléctrica, suspensión trasera independiente tipo multi-brazo con sistema adaptativo variable, y frenos de discos ventilados en las cuatro ruedas.
En lo que hace a seguridad introduce ocho airbags, Control de Estabilidad y Tracción con asistencia activa en curvas, y le suma el paquete Safety Sense dado por Sistema de pre-colisión frontal, Alerta de cambio de carril con asistencia de mantenimiento de carril, Control crucero adaptativo, Luces altas automáticas, Alerta de tráfico trasero, Cámara trasera con detección de peatones y Alerta de punto ciego.
La dotación de equipamiento de confort y tecnología incluye instrumental digital de 12,3!, multimedia con pantalla de 12,3", sistema de sonido premium con 11 parlantes y subwoofer, techo solar eléctrico, tapizados forrados en cuero, asientos delanteros ventilados y calefaccionados, y climatizador delantero bi-zona + aire acondicionado para plazas traseras, entre otros elementos.
La única versión se denomina Platinum HEV 2.4T y su precio es de US$ 136.100. Llega en seis colores: Blanco Perlado, Gris Plata Metalizado, Gris Oscuro Metalizado, Negro, Rojo Metalizado y Bronce Metalizado.
La garantía es de cinco años o 150 mil km para el auto y de ocho años o 160 mil km para los componentes híbridos: baterías, convertidor/inversor y unidad electrónica de control.
